Muchos rechazan el doble rasero de occidente a la hora de juzgar lo que constituyen crímenes de guerra
El Cairo- Casi todos los países de Oriente Medio registraron este miércoles manifestaciones y protestas en repulsa por el bombardeo del hospital Al Ahli Al Meamedany, en Gaza, una masacre que atribuyen a Israel, en defensa de Palestina y para rechazar el doble rasero de occidente a la hora de juzgar lo que constituyen crímenes de guerra.
Las marchas, multitudinarias en algunos casos como en Yemen, Baréin o Jordania, extendidas en diversas ciudades y con diversos horarios en algunos o espontáneas en otros y con un marcado carácter de apoyo al gobierno como en Egipto, reflejaron todas la misma crítica tanto hacia las acciones “criminales” de Israel como al amparo absoluto que tanto Europa como los EE.UU. dan a las acciones del Estado de Israel.
La mayoría de las mismas se desarrollaron sin incidentes de gravedad, y apenas se reportaron incidentes en el Líbano cuando una marcha intentó romper la seguridad, sin conseguirlo, en el entorno de la embajada de los EE.UU. a las afueras de Beirut.
También hubo tensión con las fuerzas del orden en el pequeño Estado insular de Baréin, de mayoría chií pero gobernado por una monarquía suní próxima a los EE.UU. y que reconoce al Israel.
“Día de ira sin precedentes”
Centenares de personas se manifestaron en algunos bastiones del grupo chií Hizbulá, en el sur del Líbano, y a las afueras de Beirut, después de que el grupo convocase para esta jornada un “día de ira sin precedentes».
En el suburbio beirutí de Haret Hreik, dominado por Hizbulá, cerca de medio millar de personas marcharon bajo consignas como “Muerte a Israel” o “Por el amor de Dios, vamos Said”, grito con el que pidieron al líder del grupo chií, Hasán Nasrala, intervenir en la guerra de Gaza.
Hizbulá está enzarzado desde el 8 de octubre en ataques cruzados con Israel en las zonas fronterizas entre ambos países y en Líbano crece el temor a que la guerra se extienda a su territorio.
“Creo que ya no hay esperanza de que los países occidentales apoyen a los oprimidos y ha llegado el momento de que nosotros apoyemos a esta gente. Si Dios quiere, pronto entraremos a Jerusalén”, dijo a EFE Ahmad, un manifestante de 26 años.
En Jordania, cuyo rey Abadalá II ha sido uno de los más críticos de Israel en esta escalada de violencia que arrancó con el asalto terrorista del brazo armado de Hamás en territorio israelí, miles de personas salieron a la calle en la capital y en varias ciudades e iniciaron una huelga general en apoyo al pueblo palestino. La movilización fue organizada por partidos políticos, sindicatos y grupos de apoyo a Palestina.