José Alfredo Espinal 
DAJABÓN. – Por la crisis política y social que atraviesa el pueblo haitiano con el magnicidio del presidente Jovenel Moïse y la falta de abastecimiento de productos básicos procedentes de la República Dominicana, se adueña cada día más la desesperación de los extranjeros, quienes piden la reapertura de la frontera y el mercado binacional.
Sin embargo, el cierre temporal de la frontera y la paralización de las actividades comerciales son necesarias, aunque son medidas que castigan a los comerciantes y a las familias de menos ingresos.
“Lo que pasó en Haití fue algo que tomó de sorpresa a los haitianos en el sentido comercial; no estaban abastecidos. Si no se abastecen lo más rápido posible se puede generar una hambruna y agravar la crisis socio política por la que se encuentra ese país”, aseguró Freddy Morillo, presidente de la Federación de Comerciantes Unidos de la provincia Dajabón.
Dijo que los problemas que suceden en Haití impactan directamente los comerciantes locales.
“Lo que sucede en Haití nos impacta a nosotros directamente. Esperamos que estas medidas sean a corto plazo”, explicó Morillo, quien señaló que por la paralización del intercambio comercial resulta afectado el sector comercio.
El dirigente dijo que observa una gran cantidad de militares por toda la zona limítrofe de la zona fronteriza, una medida que considera atinada para salvaguardar la seguridad del pueblo dominicano ante la posible estampida de haitianos al país.
Morillo entiende que las medidas de seguridad nacional que ha tomado el Gobierno se deben respetar y acatar porque vienen a traer tranquilidad a la población dominicana. “Nosotros apostamos que Haití pueda resolver su situación y en esa medida se pueda retornar la normalidad en el mercado binacional”, indicó. Dijo que salvar la vida por la crisis política y la búsqueda de alimentos podrían devenir en una estampida de haitianos a la República Dominicana.
Los artículos que más demandan los haitianos desde la República Dominicana son; pastas, embutidos, salsa, envases plásticos y de cartón, huevos, pollos, harina, papel de resma, entre otros.
