Cuerpos armados apresarán a los que violen las reglas

Las instituciones policiales y otros cuerpos armados del país cerrarán negocios que violen las decisiones que se han tomado para contener el avance de la pandemia de covid-19, enfermedad que ya ha vuelto a elevar los números en la República Dominicana.

La advertencia la hicieron ayer el ministro de Salud Pública, doctor Plutarco Arias, el vice ministro de Interior y Policía, Jesús Féliz, y el general Santo Domingo Guerrero Clase, durante una rueda de prensa en la cual las autoridades sanitarias dijeron que no dudarán en recrudecer el toque de queda si fuese necesario.

La advertencia y aplicación de las normas sanitarias se hace en momentos en que se teme un rebrote de la enfermedad, dada la apertura de la economía, el turismo y las violaciones a las normas sanitarias por parte de amplios sectores.

Las autoridades policiales apresarán a todos los que estén en las calles con supuestos permisos para transitar en horas en que cursa el toque de queda.

Jesús Féliz, del Ministerio de Interior y Policía, dijo que habrá medidas drásticas para los dueños de restaurantes y colmadones que violen las normas vigentes durante el toque de queda.

“Hombres y mujeres de Salud Pública, la Policía Nacional y los organismos castrenses estarán en las calles para hacer que se cumplan las normas”, dijo al señalar que comenzarán también una campaña casa por casa para educar a las familias en torno a las características de la enfermedad covid-19.

Se instruye a todos los miembros de la unidad interinstitucional a verificar en forma exhaustiva la validez de los permisos otorgados. La Población deberá llevar mascarillas en forma obligatoria. Las autoridades aseguraron que aplicarán “mano dura” en contra de los que violan las normas sanitarias y los que hacen que se expanda más la enfermedad.

Harán que se cumpla el distanciamiento físico y uso obligatorio de mascarillas, para tales fines se dispuso la formación de una comisión interinstitucional conformada para hacer frente a la pandemia que paraliza al mundo