El Día Mundial de los Cuidados Paliativos se celebra para difundir esta modalidad terapéutica que aborda la calidad de vida de los pacientes y sus familias
Los cuidados paliativos son el conjunto de atenciones que procuran prevenir, disminuir o tratar el sufrimiento físico, psicoemocional, social o espiritual, que implica para una persona y su familia vivir con una condición crónica en una etapa avanzada o terminal.
Estos cuidados inician cuando las expectativas de cura de una enfermedad disminuyen, desaparecen o cuando la progresión de la misma involucra deterioro de las capacidades funcionales del paciente, así como una limitación de las posibilidades de vida, asociadas a las complicaciones de la condición de base. De forma natural, el momento biológico del paciente en su ciclo vital, puede implicar necesidades paliativas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OPS), se estima que anualmente 40 millones de personas necesitan cuidados paliativos y que el 78% de las personas con estas necesidades viven en países de ingreso bajo o mediano.
Refiere además que, según un estudio de 234 países, territorios y regiones realizado en 2011, los servicios de asistencia paliativa solo estaban adecuadamente integrados en 20 países, en tanto que el 42% de los países carecía de este tipo de servicios y un 32% adicional solo contaba con servicios de asistencia paliativa aislados.
Es por esta razón que, a propósito de la celebración del Día Mundial de los Cuidados Paliativos, este año se proclama: ‘No dejar a nadie atrás’.
Se trata del lema que sustenta esta ceremonia para colocar el foco en los temas de acceso y cobertura ya que las últimas estadísticas publicadas por la OMS, tristemente nos hacen ver que tan solo un 14% de las personas que necesitan asistencia paliativa, la reciben.
El proceso de final de vida es una etapa de mucha vulnerabilidad y dependencia en que tanto el paciente como la familia requieren mucha atención para lograr gestionar las necesidades que presentan.