Daños generalizados a usuarios de electricidad

Daños generalizados a usuarios de electricidad

Por la imposibilidad logística de repartirlos selectivamente, sería mucho pedir que la recurrencia de apagones estuviera concentrada ipso facto sobre quienes no pagan la energía eléctrica por fraudes o por incapacidades de cobro; pero como está demostrado que la pérdida mayor del sistema proviene de antiguas inercias operativas y visos populistas, superar el déficit financiero necesita unos primer escalones dirigidos a vencer la pobreza de los retornos por ventanillas con estímulos a la espontaneidad y sanciones a la vez. Siendo tan honda la raíz que a través del tiempo dan vigencia a estas distorsiones, reducir sus desastrosas consecuencias no es asunto de hoy para mañana. Pero mientras no se ponga énfasis con sentido de urgencia en avasallar la cultura que deja indemnes los consumos irresponsables o decididamente delictivos, el país seguirá cavando sepultura a la eficiencia de uno de los servicios públicos más imprescindibles. Una furnia que se traga ingentes recursos de Estado en desmedro de otros fines sociales. Aparte de otro gran perjuicio: sectores productivos de todo el país y de todas las categorías que honran sus compromisos con proveedoras sufren pérdidas por interrupciones del servicio atribuibles en gran medida a la insosteniblesituación de que se genera y distribuye este insumo sin cubrir sus costos.

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Entienden, razonablemente, que recaen sobre ellos unos daños causados por otros consumidores que se aprovechan de debilidades, históricas y prolongadas, que tampoco se deben a los usuarios de buena ley. El panorama del sector energético incluye además una todavía elevada subordinación a combustiones de plantas a base de petróleo y carbón y un esquema institucional que estimula poco, y a veces hasta obstaculiza, la adopción a nivel doméstico y empresarial de fuentes alternativas. Los incentivos a la inversión para aprovechar la radiación solar y el viento no están a la altura que han alcanzado en otros países, incluyendo a los de esta misma región del continente, a los que el futuro de energía barata y no contaminante está haciendo su introducción con éxito. De entrada, aquí es de suprema necesidad superar la magnitud de los pasivos.