Río de Janeiro. El tenista español David Ferrer afirmó hoy, en vísperas de su debut en el ATP 500 de Río de Janeiro, que no le obsesiona el brote de virus del zika que sufre actualmente Brasil. Ferrer afirmó en una rueda de prensa que el zika “no es muy importante” para los hombres, aunque sí supone un riesgo “para las mujeres embarazadas».
“Hemos hablado con los jugadores locales y no se le da bastante importancia. Queda mucho que investigar. No me he parado mucho a pensarlo. Nos han dicho que han tomado muchas medidas para que no haya mosquitos en el torneo. Y que nos pongamos pantalones largos en el comienzo de la noche, cuando salen los mosquitos, y por la mañana.
Tampoco me obsesiono”, comentó. El jugador español aseguró que, desde su llegada a Brasil, el domingo, no salió del hotel y dijo que no tiene previsto hacer “nada especial” para prevenirse del zika, aunque admitió que es “imposible” ponerse manga larga con el clima cálido y húmedo del verano de Río de Janeiro.
Ferrer es el defensor del título del Abierto de Río y debuta mañana ante el chileno Nicolás Jarry, que llegó al cuadro principal por carta de invitación de la organización.