Las declaraciones de la primera dama de Ecuador, María de Lourdes Alcívar, en un evento con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer en el que rechazó la idea de que las mujeres sean víctimas, y dijo que se aparta cuando ve a su marido «alterado», han provocado polémica.
La esposa del presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, intervino hoy en el evento de lanzamiento de la campaña «De la indignación a la acción», impulsada por el Gobierno para visibilizar la violencia machista, y se salió del guión al tratar de expresar con sus palabras su ideario acerca de lo que deben hacer las mujeres para enfrentar esta lacra social.
«Muchas veces tenemos el afán de pensar que nadie nos comprende, nos volvemos víctimas y es terrible. No, mujeres, no somos víctimas de nadie, solo de nosotras mismas si nos dejamos», y añadió: «Si no nos hacemos respetar nada va a cambiar», dijo en su discurso.
También se dirigió a las mujeres y niñas al rememorar que cuando tenía entre 9 y 10 años su madre solía comentarle «cuidado, ese señor por más tío que es, cuidado, ese señor que vino» antes de pedir a las menores «nada de zalamerías» para advertir a las «niñitas que de chiquitas se cuiden».
En apenas tres horas desde que se desarrolló ese evento en Tweeter la tendencia en Ecuador es Primera Dama con más de 4.000 tweets, en su mayoría de indignación precisamente porque las instituciones y ONG han informado que en lo que va de 2021 se han registrado 196 mujeres víctimas en circunstancias violentas, la mayor cifra desde que se tipificó el femicidio en el país en 2014.
«No mujeres, no somos víctimas de nadie, solo de nosotras mismas». A las niñas: «Nada de zalamería» con los hombres. «Por fin tenemos Primera dama», decían en mayo 2021″, reza un trino en la red social.
Otra usuaria calificaba de «terrible el discurso de la primera dama @MLAlcivar. A cuantas mujeres incita a callar y a «arreglar» los problemas puertas adentro expuestas a ser agredidas de forma psicológica, física e incluso terminan asesinadas».
Alcívar también se refirió a situaciones de desavenencia conyugal al declarar: «Si en tu hogar tienes un esposo que de repente eleva la voz, le (sic) salen de sus casillas, o tu mismo, dios quiera que tengas a tu lado alguien que no lo haga, porque si dos no pelean, no se dan esas circunstancias, créanme».
«Nosotros en casa procuramos eso, si Guillermo está un poco alterado, yo prefiero irme por la derecha», acotó la primera dama.
De acuerdo con el portal Femicidios.ec, que gestiona el Consejo de la Judicatura, entre el 1 de enero y el 7 de noviembre de 2021 un total de 196 mujeres murieron de forma violenta en el país, y se notificaron 175 delitos relacionados con esos casos.
Esos datos representan un incremento del 19 % respecto al registro de todo 2020, y del 32 % en relación al año prepandémico de 2019.
Los registros históricos oficiales de femicidios en el país que se iniciaron hace siete años arrojan un total de 1.263 mujeres asesinadas en las 24 provincias del país.
Ecuador es uno de los países con mayor normalización de la violencia contra la mujer por el hecho de serlo de la región, y se ubica entre los primeros en embarazo infantil (menores de 14 años) y adolescente, de acuerdo a ONU Mujeres.
La violencia contra mujeres y niñas es una violación grave de los derechos humanos y el derecho de las mujeres a vivir sin violencia está recogido en acuerdos internacionales. En el ámbito mundial, solo el 40 % de las mujeres busca ayuda tras sufrir violencia, lo que obliga a las instituciones a promover políticas de prevención y ayuda.