Luego de las más recientes declaraciones de la organización Amnistía Internacional, sobre el presunto maltrato a los haitianos, de este lado de la isla, el defensor del pueblo, Pablo Ulloa, que existen áreas que se pueden mejorar en materia de derechos humanos, pero ha dejado claro que su compromiso con los derechos fundamentales “no es negociable” y que República Dominicana es “un país soberano, con una profunda convicción en el respeto a la dignidad y a su Constitución“.
A continuación el comunicado íntegro
DEFENSOR DEL PUEBLO
República Dominicana
Amnistía internacional
Nuestro país ha demostrado, a lo largo de su historia, su capacidad para enfrentar desafios y avanzar en la construcción de una sociedad más justa y digna para todos los seres humanos, siempre en el marco del respeto a nuestra Constitución y a las instituciones que nos rigen.
Las observaciones realizadas por Amnistía Internacional no reflejan con precisión los esfuerzos y logros que hemos alcanzado como nación. Si bien reconocemos que aún existen áreas de mejora, es fundamental destacar que nuestro compromiso con los derechos fundamentales no es negociable.
Estamos trabajando de manera constante para fortalecer nuestras instituciones, promover la transparencia y garantizar que los derechos de todos los dominicanos y dominicanas sean plenamente respetados.
La República Dominicana es un país soberano, con una profunda convicción en el respeto a la dignidad humana y a su Constitución. Seguiremos trabajando para garantizar un futuro en el que todos puedan vivir con dignidad y seguridad, bajo un Estado que respete y defienda los derechos de sus ciudadanos.
El Defensor del Pueblo de la República Dominicana invita a que cualquier caso concreto sea presentado de manera formal, y garantizo que recibirá una respuesta responsable, coherente con los principios que han caracterizado la vida y el compromiso con la justicia y la equidad, de su titular y el equipo que conforma este órgano constitucional.
Nuestra prioridad es y siempre será el bienestar de nuestro pueblo, actuando en defensa de los derechos y bajo el respeto a nuestra Constitución y nuestras instituciones. En esa dirección continuaremos, sin aceptar presiones o valoraciones externas que no reconozcan nuestra realidad y nuestro progreso. La defensa de los derechos humanos en nuestro país es, y seguirá siendo, una
responsabilidad asumida con seriedad y compromiso, basada en el respeto mutuo y la soberania
nacional.
Defensor del Pueblo