Enfrentar el cambio climático, que reserva progresivos daños mayores a la aldea común que es la Tierra, con particular intensidad para islas como estas del Caribe por ascenso del nivel del mar, estuvo presente en el mensaje del presidente Luis Abinader en la reciente «Cumbre del Futuro» en la sede de Naciones Unidas en Nueva York.
Su exhortación a los Estados a coincidir en objetivos primordiales, poniendo de lado las contradicciones, expresó la preocupación del primer mandatario por escenarios de intensas guerras en Oriente Medio y Europa Oriental con potencial riesgo para la paz y la estabilidad mundiales.
No escapó a su atención el fenómeno de la corrupción que aquí y en muchas partes genera enriquecimientos en perjuicio de las naciones y es criminalmente contraria al desarrollo. Ahora que avanza ambivalente, ( y encerrando peligros) el uso de la Inteligencia Artificial, era por demás oportuno que el Presidente Abinader reclamara confluir en empeños por garantizar el acceso indiscriminado y positivo a este recurso para todas las naciones.
En el marco de una gira conveniente al país, el Presidente de los dominicanos se adhirió resueltamente a la crucial aspiración de que para las presentes y futuras generaciones se redefinan condiciones más justas, equitativas y sostenibles que eviten que el mundo sufra una violencia desproporcionada e injustificada y que a corto plazo se logre reducir la emisión de gases de efecto invernadero.