El presidente del Instituto Duartiano, doctor Wilson Gómez Ramírez, denunció este miércoles que organismos internacionales pretenden imponer planes de regularización de migrantes irregulares haitianos, más allá de la ley y la razonabilidad, atacando la esencia misma de nuestra nacionalidad.
Manifestó que ese organismo está en vigilia ante lo que definió como “vientos que están soplando desde algunos litorales nacionales que tradicionalmente sirven a los intereses de instituciones extranjeras que conspiran contra la soberanía del pueblo dominicano”.
Gómez indicó que se ha estado gestando un clima de intranquilidad que, en el momento, encuentra un impulso con las declaraciones del director ejecutivo del Instituto Nacional de Migración (INM RD), Wilfredo Lozano, quien planteó la alegada conveniencia de “buscar una solución a la regulación migratoria y al Plan Nacional de Regularización de Extranjeros (PNRE)”.
Señaló que Lozano debe explicar con claridad qué quiere decir cuando habla de su propósito de replantear la cuestión migratoria, y poner en práctica un reposicionamiento de las políticas públicas, al tiempo de exhortar al “fortalecimiento del marco institucional de la gobernanza migratoria que permita la eficaz aplicación de la Ley General de Migración 285-04, así como la estructura del Consejo Nacional de Migración (CNM)”.
“En el momento lo que se impone es la aplicación de la ley migratoria y hacer todo lo que en buen derecho hacen las diferentes naciones, mandar a sus países a todo el que esté ilegalmente en su territorio, preservando siempre el debido proceso”, dijo el presidente del organismo, agregó el presidente del Instituto Duartiano.
Recordó que el director ejecutivo del Instituto Nacional de Migración es cabeza del órgano técnico que debe asesorar al Consejo Nacional de Migración, a este lo integran once importantes entidades, entre estas ocho representadas por sus ministros de Estado, el presidente de la Junta Central Electoral y los congresistas que presidan las Comisiones de Interior y Policía de ambas cámaras.
Gómez Ramírez indicó que esa entidad patriótica que dirige entiende que, desde la administración del Estado se tiene que actuar con rectitud en la aplicación rigurosa de todas las leyes del país, incluyendo las disposiciones legales de carácter migratorio, las cuales constituyen una vigorosa expresión de la facultad soberana de la Nación dominicana.
Expuso que los dominicanos hemos sido más que solidarios con el vecino Haití y sus nacionales, el estado dominicano debe mantener esos lazos de cooperación y ayuda; pero, al mismo tiempo debe insistir para que la solidaridad internacional se manifieste a favor de ese empobrecido pueblo.
Dijo que la inmigración haitiana en la República Dominicana constituye el 87.2 de la totalidad de extranjeros que residen aquí y, cada año se registra un elevado incremento de aproximadamente un 34 por ciento.
Esta carga que lleva a cuesta el estado dominicano resulta insoportable, solo en el renglón escolar entre 2016 y 2019, se invirtió la cantidad de 11 mil 939 millones 367 mil 891 pesos con 74 centavos en estudiantes haitianos matriculados en escuelas del país, que ni siquiera respetan los símbolos de nuestra Patria.
En el año 2018 el Servicio Nacional de Salud invirtió más de 1,800 millones de pesos en atenciones de salud a la población inmigrante en territorio dominicano, de estos el 90 por ciento, eran nativos de Haití.
El Instituto Duartiano entiende que esta es una carga muy pesada para un país que, como el nuestro, tiene sus propios pobres, los cuales no atiende debidamente, en parte por lo que destina a los haitianos que aquí residen ilegalmente o que viene desde su país a dar a luz o a procurar asistencia en nuestros hospitales.