PARÍS. La policía francesa desalojó el viernes a estudiantes de un edificio de la Universidad de París que estuvo ocupado durante un mes en protesta por los cambios al sistema de admisión que también han causado alboroto en otros planteles.

Las fuerzas del orden dijeron que el desalojo se efectuó sin incidentes en el Centro Tolbiac, una torre de 22 pisos afiliada a la Universidad París 1, en el sur de la capital francesa.

El ministro del Interior, Gerard Collomb, tuiteó que «el estado de derecho será restaurado en todas partes».

Los estudiantes han bloqueado el acceso o interrumpido clases en otros planteles en Francia en protesta contra los cambios que ellos temen que amenacen el acceso de todos los graduados de las escuelas secundarias a la universidad pública.

El rector de la Universidad París 1, Georges Haddad, dijo que ningún estudiante resultó herido durante el desalojo y afirmó a la prensa que sentía un «gran alivio».

La policía descubrió «más de 10 bombas Molotov» en el centro, afirmó. Dijo que la ocupación causó daños por «cientos de miles de euros» y que el lugar permanecerá cerrado hasta nuevo aviso.

El nuevo sistema de admisión permitirá a las universidades clasificar a los aspirantes, según su criterio, debido a lo cual algunos prospectos podrían ser rechazados o enviados otros programas en caso de falta de cupo.

Los graduados de secundaria tienen garantizado el acceso a la universidad gratuita al margen de sus calificaciones.

La presidenta de la unión de estudiantes UNEF, Lila Le Bas, describió el desalojo como «inaceptable». Censuró al gobierno por rehusarse a responder a las demandas de los ocupantes. «Prefieren enviar a las fuerzas policiales a las universidades», dijo Le Bas al servicio noticioso televisivo Francelnfo.

El portavoz del gobierno Benjamin Griveaux dijo que la policía podría intervenir «según caso por caso» para garantizar la realización de los exámenes de fin de periodo. Las ocupaciones de inmuebles universitarios tienen lugar en medio de diversas protestas y huelgas contra los planes del presidente Emmanuel Macron de efectuar cambios en los sistemas ferroviario, hospitalario y judicial dentro de su agenda económica.

Miles de personas marcharon el jueves en Francia mientras los trabajadores ferroviarios reanudaron sus huelgas escalonadas tendentes a combatir los planes de Macron de reorganizar la compañía ferroviaria nacional SNCF y abrir la red de trenes a la competencia.

Macron dijo que no cederá a las exigencias y afirma que fue elegido el año pasado para emprender reformas en el país.