Los doctores Jorge Marte y Carlos García Lithgow afirmaron que a pesar que el covid-19 ha dejado secuelas en los pacientes afectados, no se aprecia un aumento de patologías producto de la pandemia de esa enfermedad.

Además que no se puede atribuir un aumento de los infartos debido a las vacunas pues el promedio de estos eventos no ha variado de 4,500 a 5000 al año según las estadísticas oficiales.

Marte es el director médico de los Centros de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (CEDIMAT) mientras que García es el director de Hemodinamia del Centro Cardiovascular de esa entidad.

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Marte indicó que enfermedades como la coronaria y la diabetes empeoraron durante la pandemia debido a la falta de atención médica oportuna, ya que muchos pacientes temían ir a los centros por posible contagio de covid-19 o porque muchos cerraron sus puertas.

“Los pacientes no encontraban dónde atenderse, ya que muchos centros de salud estaban cerrados, y el miedo a salir de casa empeoró la situación”, expresó Marte durante el Almuerzo del Grupo Corripio.

Expuso que aunque reportes señalan un incremento de estas enfermedades durante la pandemia, es difícil establecer una conclusión definitiva por los posibles sesgos epidemiológicos que rodean la información.

Sobre el argumento de las vacunas trajeron otras patologías Marte y García fueron enfáticos en defender su efectividad. Sin embargo reconocen que algunas de ellas produjeron miocarditis y la formación de coágulos en las arterias pulmonares en un porcentaje de los pacientes afectados de covid-19, llegado a estar presentes en casi todos los que fallecieron.

Sin embargo el riesgo de muerte por covid-19 era mayor y si no se hubieran aplicado la cantidad de fallecido fuera cinco veces mayor. En el país alrededor de 4,000 personas murieron por la enfermedad.