La Policía Nacional informó que desarticuló una peligrosa banda criminal dedicada al robo de vehículos, la cual estaba integrada por tres deportados de los Estados Unidos y por otras nueve personas.
La institución del orden explicó que la banda fue desarticulada por el Departamento de Investigación de Vehículos Robados que logró apresar a siete de los antisociales, recuperó 11 vehículos robados y persigue a cinco que permanecen prófugos.
Los apresados son Juan Ubaldo Contreras Guillermo (a) Danny, de 38 años; Pablo Alexander Mendoza Matías (a) Papitín, de 25; Jonathan Abreu Lugo, de 31; José Vladimir Fernández Taveras (a) Papo el Mecánico, de 45; José Ramón Liriano (a) Ronny y/o Pica, de 33; Jairo Daniel Lantigua Caba, de la misma edad, y Khalil Enrique Arias González, de 25.
El grupo de antisociales era dirigido por Juan Ubaldo (a) Danny, deportado de los Estados Unidos, tras cumplir condena en una cárcel federal por robo de vehículos y falsificación, al igual que Jonathan Abreu y Edinkson Belliard Mendoza (a) El Prieto, de 30 años, éste último permanece prófugo.
Los prófugos perseguidos son Gabriel de Jesús Marrero Liriano (a) Gaby, y unos tales “Wilmer”, “Cuñingo”, “Francis” y “Carlos”, a quienes nuestra Policía exhorta a que se entreguen por la vía que consideren de lugar.
Modus operandi
Para llevar a cabo las actividades delictivas, nuestros investigadores determinaron mediante ardua labor de inteligencia que Juan Ubaldo y Edinkson utilizan a Pablo Alexander y Cuñingo para que tomen fotografías de los vehículos que ya ubicaron previamente para robarlos.
Luego, las imágenes son enviadas a Jairo Daniel, residente en Santiago, lugar donde labora como cerrajero y, mediante el uso de Internet, éste obtiene el diseño de la llave del vehículo seleccionado y elabora una copia, recibiendo entre RD$3,500.00 y RD$4,000.00 por este trabajo.
Una vez con la copia de la llave en su poder, Juan Ubaldo y Edinkson eligen a los encargados de sustraer el automóvil, que en este caso serían Pablo Alexander, Jonathan, José Vladimir y Francis.
Luego de la sustracción, Juan Ubaldo y Edinkson se contactan con José Ramón (a) Ronny, quien sirve de intermediario para ofertar los vehículos robados, por lo que luego de captar a un comprador, trasladan el automóvil hasta la ciudad de Santiago, donde reside “Ronny”, donde los dos primeros reciben un pago entre 80 y 100 mil pesos.