Hoy martes, 22 de marzo, se conmemora el Día Mundial del Agua, y la República Dominicana tiene años intentando conciliar el proyecto de Ley de Agua Potable y Saneamiento, iniciativa que el pasado 8 de este mes fue declarada de prioridad en la Cámara de Diputados.

Tiene por objeto establecer el régimen para la instrumentación de la reforma institucional del sector agua potable y saneamiento, que incluye el establecimiento de un nuevo modelo de organización sectorial, que separe las funciones de rectoría, regulación y prestación de servicios públicos sectoriales.

El actual proyecto lo propuso el diputado reformista Máximo Castro Silverio, y no ha llegado a comisión desde el año pasado. El conflicto se ha generado por el principio de separación de roles, ya que las funciones de rectoría y regulación corresponden al Estado y se determinan inalienables.

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Esta iniciativa, número 05998-2020-2024-CD, fue incluida en los 40 proyectos que el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, anunció que intentan aprobar en la legislatura ordinaria que abrió el pasado 27 de febrero y que concluye en julio de este año.

Medio Ambiente será el regulador

Las autorizaciones de uso de agua o títulos de aguas con destino al abastecimiento y saneamiento a la población, serán otorgados por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de acuerdo a su Ley 64-00, acción que será en favor de los prestadores habilitados previamente por la Autoridad Rectora y/o Superintendencia.