El candidato a senador del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Ramón Alburquerque, calificó ayer de “retaliación política” la orden de arresto dictada en su contra por la jueza suplente de Servicios de Atención Permanente del Distrito Judicial de Monte Plata, Hardys Ydalisis King, para ser investigado por la muerte a tiros de dos personas durante el proceso electoral del domingo.

No obstante, a través de su abogado, Antoliano Peralta Romero, sometió un recurso de hábeas corpus por ante la Segunda Sala de la Cámara Penal, el cual será conocido el próximo martes a las 9:00 de la mañana.

La orden de arresto contra Alburquerque fue solicitada por la procuradora adjunta Gertrudis de la Cruz Heredia y expedida mediante Auto número 01180-2016 el 16 de mayo en curso, e incluye también al candidato a alcalde del PRM Conrado de la Cruz Quezada (El Gago).

En la misma se señala que la orden de arresto contra ambos candidatos del PRM se hace en virtud de una denuncia hecha por la Policía Nacional, tras la muerte a tiros de Alexander Reyes de León y Orlando Antonio Moreno Martínez, “y se hace necesaria la presencia de la persona que está siendo denunciada, máxime que existen indicios razonablemente que es autor o cómplice” de una infracción, lo que implica que esta pudiera ocultarse, fugarse o ausentarse del lugar.

Versión de Alburquerque. El exsenador afirmó que no ha sido notificado de ninguna orden de arresto. Sin embargo, dijo estar dispuesto a acudir por ante la justicia.
Refirió que cuando ocurrió el incidente en el que resultaron muertos Reyes de León y Moreno Martínez, él, junto a su familia y otras dos personas más, venía de Yamasá para la Capital, a recorrer los centros de votación “A las 6:00 de la tarde, saliendo de Yamasá, pasando por el distrito municipal de Los Botados, en el centro de votación llamado Reparadero, ahí me dice el candidato nuestro, Conrado de la Cruz, que ese centro está colmado de civiles armados”.

Agregó que se desmontó de su vehículo y exhortó a los jóvenes que estaban allí a que se fueran a sus casas, porque no podían estar reprimiendo en ese centro a delegados de la oposición, y dejaran que se contaran los votos como manda la democracia.

“En eso hay un forcejeo y un manoteo con el candidato (Conrado) y suenan unos tiros. Mi seguridad, un capitán y un mayor que tengo asignados por mi condición de expresidente del Senado, me dijeron, ingeniero, móntese y vámonos, y nos fuimos”.

Dijo que alrededor de 20 minutos después le informaron de las dos muertes que se produjeron en el lugar, y ese mismo día llamó a la Z101 pidiendo que se investigara tan bochornoso y doloroso hecho, pero que su familia y él estaban contentos porque ninguno fue agredido ni baleado porque salieron antes del tiroteo.

“Entonces ahora, siendo nosotros víctima de la temeridad de estos peledeístas, le lleva entonces a hacer que los familiares de las lamentables víctimas, radiquen contra nosotros una querella vacía, y han dado una orden de arresto y de prisión totalmente en el aire, y lo estamos haciendo del conocimiento público porque la lucha política no puede llegar a niveles tan bajos”, dijo Alburquerque a Hoy.