Dos expertos agrícolas ven el momento de modernizar la nueva oferta en la agricultura

Dos expertos agrícolas ven el momento de modernizar la nueva oferta en la agricultura

Si en estos momentos se mide la producción agropecuaria dominicana por los indicadores de precios a los consumidores, afectados de una crisis económica originada en el sistema financiero del país, podríamos equivocar la evaluación de un sector tan importante, cuya meta bajo las actuales circunstancias ha consistido en mantener una amplia oferta alimentaria sostenible.

Tal es la reflexión del subsecretario de Planificación de Planificación Sectorial Agropecuaria de la Secretaría de Estado de Agricultura, doctor Jesús de Los Santos. Según él, un mejor diagnóstico que puede hacerse sobre la gestión actual no es sólo en términos de lo que los indicadores de precios muestran, sino también en los esfuerzos mancomunados que las autoridades y el equipo técnico y de planificación de la Secretaría de Agriclutura está realizando para lograr cambios duradero en la agricultura dominicana.

En ese mismo orden plantea el recién elaborado «Diagnóstico del Sector Agropecario del 2002», donde se recogen las acciones efectuadas por la SEA y su equipo de técnicos y funcionarios.

Para el doctor De los Santos, lo que más resalta de la evaluación que se ha hecho del sector está en el cambio que propueve entre los agricultures dominicanos a todos los niveles.

«Ya la República Dominicana no es el país que existió hasta hace 20 ó más años en que prevaleía una agricultura de pastoreo para la subsistencia de quienes se dedicaron por generaciones enteras a sacar los frutos del surco de una manera natural», resalta el funcionario.

Hasta hace pocos años y aún en muchas regiones del país subsiste un tipo de agricultura superada en que se aprovechan los beneficios de la tierra solamente aplicando los rudimentarios conocimientos que les eran transmitidos de padres a hijos de generación a generación, destaca el funcionario de la SEA.

«Por estos resultados, entre otros, es que deben ser evaluados los nuevos parámetros que hoy sirven de guía a nuestra agricultura -sostiene-, y por ellos deben regirse las evaluaciones que presuntos expertos de este sector viven haciendo sin preocuparse por plantear qué es lo que verdaderamente hay que hacer para que superemos tantos atrasos acumulados en el campo dominicano».

Considera que si bien es verdad que las críticas contribuyen cuando son bien ponderadas a mejorar lo que se está haciendo, en el caso de los esfuerzos y el desempeño que el gobierno está teniendo, se ha sido no solamente injusto, sino también ignorante de los cambios y logros que se han introducido en un sector que ha sido el que más resistencia a las variaciones ha mostrado.

Explica que en todos los países casi siempre el último en someterse a las nevas situaciones cambiantes son los productores del campo, ya que la mayoría de las veces los gobiernos no se ha preocupado porque dichas transformaciones se verifiquen.

La actitud indiferente de gobernantes y la ignorancia sobre las verdaderas metas que deben guiar a los funcionarios a cargo de las transformaciones en el campo, igualmente han sido el complemento a muchos fracasos.

Pero sostuvo que el actual equipo que encabeza el agrónomo Eligio Jáquez al frente de la SEA no ha dormido en favor de realizar las acciones conducentes a modernizar la agricultura dominicana.

«Esta ha sido la meta del Presidente de la República, Hipólito Mejía, la del secretario Jáquez, así como también la de todo un equipo de expertos en las ramas que les ha tocado desempeñarse.

[b]HACIA UN NUEVO AGRO[/b]

En ese sentido señaló el éxito que está teniendo el país en haber iniciado el gran programa de modernización del agro dominicano, para lo cual se ha estado trabajando de manera callada a fin de que el país pueda contar con una agricultura y pecuaria modernas en pocos años.

El subsecretario De los Santos expone que todas las actividades que ejecuta la SEA están destinadas a optimizar la capacidad de producción del sector, de manera que la oferta alimentaria tann imprescindible no sucumba en el país.

Es cierto, agrega, que en el país existe actualmente una grave crisis económica que ha sido propulsada no por las políticas gubernamentales, sino por los desaciertos de una parte del sistema financiero que obró a espaldas de las autoridades.

Puso de relieve cómo en países como Inglaterra, Uruguay, Japón y hasta en los propios Estados Unidos y en naciones europeas, empresarios privados aprovechan algunas debilidades institucionales para realizar actividades reñidas con los objetivos de la empresa privada libremente organizada.

Es verdad que eso ha afectado en gran medida a todos los sectores, incluyendo al agropecuario, «pero ha sido una gran previsión de este equipo en la SEA el evitar que suceda lo que acontecía en el pasado cuando se presentaban crisis económicas, en que además de la población sufrir el efecto de las alzas de precios por asuntos macroeconómicos, también se veía confrontando una severa crisis de desabasto, lo cual no ha ocurrido ni ocurrirá mientras este equipo esté al frente de esta institución».

Si existe una directriz que de antemano han trazado tanto el presidente de la República como el secretario Jáquez a este equipo de trabajo «es el de no dejar caer la oferta alimentaria nacional».

A su juicio, ha sido esta gran oferta productiva la que ha atajado la gran escalada que pudo haber tenido una crisis que de haberse dejado continuar habiese sometido a una verdadera catástrofe alimenticia a todo el país.

Pero en el país no se ha dado una hambruna colectiva como ha ocurrido en otros países, motivado por una situación de falta de productos que contribuyan a una mayor carestía de la canasta familiar de los dominicanos.

[b]JAD: SUPERANDO UN MODELO[/b]

Osmar Benítez, vicepresidente ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), considera que el país está viviendo en materia agrícola y pecuaria un proceso de transición hacia unos estándares modernos en esta área.

«No puede esperarse que de pronto, surja una República Dominicana moderna y todo con sólo el deseo de que así sea», explicó.

Para ello, tanto el sector privado organizado al rededor de la JAD y otras entidades que están aglutinadas alrededor nuestro hemos venido compartiendo toda una serie de intercambio de ideas y de estudios y enfoques sobre nuestra realidad productiva.

De ello ha sido el resultado de varios diagnósticos que ya nos dijeron por dónde deben andar las cosas. No podemos dejar de lado que somos un país en vías de desarrollo y que debemos modernizarnos para poder competir en un mundo cada vez más globalizado.

Pero hemos dicho y reiterado que no basta con querer competir, puesto que hay que saber cómo hacerlo. Y para ello hemos ya identificado varios nichos de competitividad en los que los agricultores dominicanos podemos ser fuertes y hacer de nuestra agricultura un sector sostenible y altamente competitivo.

«Por eso ha sido necesario llamar a los campesinos, productores tradicionales o no en todas las regiones, para que se organicen -indica el ejecutivo de la JAD-, a lo cual hemos contribuído porque ya se sabe que aislados no vamos a ninguna parte, mucho menos a lograr los objetivos de insertarnos en estos nuevos mercados que se han estado identificando para nuestros productos exportables».

Es el momento -sostiene Osmar Benítez-, de multiplicar la agricultura por vía científica, pero respetando el medio ambiente, el momento de acrecentarla conla instalación de múltiples viveros, fincas experimentales, fincas de productos elaborados en invernaderos, así como de acrecentar todo el equipo tecnológico necesario para impulsar esta vital área de nuestra economía.