Estados Unidos anunció este martes su intención de aumentar la ayuda a la Franja de Gaza, aprovechando que Israel anunció el lunes que rebajará la intensidad de la guerra en el norte del enclave.
“Estamos preparándonos para aumentar la asistencia humanitaria a aquellas personas que la necesitan, así como para contribuir a crear las condiciones para que la población regrese al norte de Gaza”, declaró John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, en una rueda de prensa.
Según explicó el portavoz, el enviado especial estadounidense para el conflicto, David Satterfield, y el embajador de EE.UU. en Israel, Jack Lew, se reunieron este martes con altos cargos del Gobierno israelí para abordar este asunto.
“Estamos haciendo estos preparativos porque creemos que las operaciones con menor intensidad dentro de Gaza deberían no solo permitir una reducción de las bajas civiles, sino también una distribución más fiable de la ayuda en el período próximo”, indicó Kirby.
El portavoz no ofreció más detalles hasta qué punto Washington aumentará su ayuda a Gaza, que está experimentando una devastación sin precedentes en lo que se considera la guerra más mortífera en la historia reciente de la región.
Según señaló el lunes el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, la Franja, con cerca de 2 millones de desplazados que viven hacinados y en riesgo de hambruna, se encamina hacia su mayor catástrofe humanitaria, donde “la vida es un infierno».
El ataque de Hamás del 7 de octubre dejó 1.200 israelíes fallecidos y unos 250 secuestrados. Desde entonces, las fuerzas israelíes han acabado con la vida de 24.300 en la Franja de Gaza, un 70% de ellos niños y mujeres.