Las pastillas impresas en 3D podrían abrir el camino a un futuro en el que los medicamentos se podrían personalizar para los pacientes de manera individual.
Sentando el primer precedente mundial la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) le dio el visto bueno a la producción de la primera pastilla impresa en 3D.
Hasta ahora el organismo había aprobado el uso de esta tecnología en dispositivos médicos, como prótesis.
Pero es la primera vez que se abre la puerta a un medicamento para ingerir.
Supercompacta
Las píldoras, denominadas Spritam y desarrolladas por la empresa Aprecia Pharmaceuticals, están formuladas para controlar ataques de epilepsia.
La compañía dijo que planeaba en el futuro utilizar su plataforma de producción en 3D también para otros medicamentos.
La tecnología de la impresión le permitió a la farmacéutica poner varias capas de medicamento de una manera más compacta y en dosis precisas.
Así, hizo posible presentar pastillas individuales de hasta 1.000 miligramos.
Estas píldoras impresas en 3D se disuelven de la misma manera que otras medicinas orales.