Un agente iraní ha sido acusado por formar parte de un plan para asesinar a John Bolton, exasesor de seguridad nacional de Estados Unidos, que ofrecía 300.000 dólares por “eliminar” al funcionario del gobierno de Donald Trump —presumiblemente como represalia por un ataque estadounidense en el que murió el general iraní más poderoso—, señaló el Departamento de Justicia el miércoles.
Shahram Poursafi, identificado por funcionarios de Estados Unidos como miembro de la Guardia Revolucionaria de Irán, actualmente es buscado por el FBI por cargos relacionados con el complot.
Fiscales aseguran que el plan se formuló más de un año después de que Qassem Soleimani, líder de las Fuerzas Quds — un grupo élite de la Guardia Revolucionaria — y arquitecto de las guerras indirectas de Irán en Medio Oriente, murió en un ataque aéreo dirigido mientras se encontraba en el aeropuerto internacional de Bagdad en enero de 2020.
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Después del ataque, Bolton, quien para entonces ya había dejado su cargo en la Casa Blanca, tuiteó: “Espero que este sea el primer paso para un cambio de régimen en Teherán”.
El FBI cree que Poursafi actuaba a nombre de la Guardia Revolucionaria al momento en que buscó que alguien matara a Bolton, según una declaración jurada dada a conocer el miércoles.
Funcionarios policiales encontraron fotografías de él con uniforme camuflado y con pósters de Irán y de Soleimani en el fondo para respaldar su acusación de que es miembro uniformado de la Guardia Revolucionaria.
Según el Departamento de Justicia, el complot se remonta a finales de 2021, cuando Poursafi, un ciudadano iraní que según las autoridades nunca ha visitado Estados Unidos, le pidió a una persona no identificada que conoció a través de redes sociales y que en ese momento vivía en Estados Unidos que tomara fotografías de Bolton para un libro que estaba escribiendo.
La persona presentó a Poursafi con un conocido que podía tomar las fotos y videos que le había pedido.
Después de que ambos se pusieron en contacto, Poursafi alentó a esa persona, quien en realidad era una fuente confidencial que colaboraba para el FBI, para que contratara a alguien para asesinar a Bolton, ofreciéndole 300.000 dólares por hacerlo. Poursafi le dijo a la persona que quería que “el tipo” fuera eliminado.
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Poursafi le dio a esta persona la dirección de la oficina de Bolton, incluyendo nombre e información de contacto de alguien que trabajaba en la oficina, y tomó capturas de pantalla de fotografías de vigilancia de la oficina de Bolton, de acuerdo con la declaración jurada del FBI.
En una declaración, Bolton agradeció al FBI y al Departamento de Justicia su trabajo en el desarrollo del caso y al Servicio Secreto por proporcionarle protección.
“Aunque ahora no se puede decir mucho públicamente, un punto es indiscutible: Los gobernantes de Irán son mentirosos, terroristas y enemigos de Estados Unidos”, dijo.
La misión de Irán ante las Naciones Unidas no respondió por el momento a una solicitud de comentarios.
Se desconoce el paradero actual de Poursafi, y no está claro cuándo será detenido o si lo será. Enfrenta cargos de utilización de instalaciones de comercio interestatal en la comisión de un asesinato por encargo y de intento de prestar apoyo transnacional a un plan de asesinato.