Estados Unidos amenazó con multas de cientos de miles de dólares a algunos indocumentados, incluidos varios refugiados en iglesias, si desobedecen sus órdenes de deportación, según fuentes oficiales citadas este martes por el diario The Washington Post y la emisora de radio pública NPR.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas estadounidense envió en los últimos días una serie de avisos a inmigrantes en todo el país en los que les ordenaba pagar multas de hasta 500.000 dólares por “no abandonar Estados Unidos como se acordó previamente”, de acuerdo con documentos revisados por NPR.
“La intención de ICE es ordenarle que usted pague una multa por la cantidad de 497.777 dólares”, escribió una funcionaria del ICE, Lisa Hoechst, en una carta fechada el pasado 25 de junio y enviada a Edith Espinal Moreno, una inmigrante mexicana de 42 años.
Espinal llegó a Estados Unidos con sus padres cuando tenía 16 años y tiene tres hijos, entre ellos dos que son estadounidenses. Desde que un juez ordenó su deportación hace dos años, ha estado viviendo en una iglesia en Ohio para esquivar a las autoridades migratorias.
“Quieren asustarme porque saben que estoy en un santuario. Y saben que no tengo esa cantidad de dinero”, afirmó Espinal a NPR. El ICE también notificó este lunes a Rosa Ortez Cruz, una hondureña de 38 años que vive en una iglesia en Chapel Hill (Carolina del Norte), de que le exigía 314.007 dólares si sigue evadiendo su orden de deportación, de acuerdo con el Post.
«¿Pedir más de 300.000 dólares a una persona que no tiene nada? Ya de paso, que pidan un millón de dólares, o mil millones. Ella no tiene nada de valor monetario. Está desempleada, vive en una iglesia”, afirmó al rotativo el abogado de Ortez Cruz, Jeremy McKinney.
También hay inmigrantes afectados por esos avisos de multa en Colorado, Utah, Virginia y Texas, señalaron ambos medios.
La ley estadounidense permite al menos desde 1996 que el Gobierno federal imponga multas por la vía civil a indocumentados sujetos a órdenes de deportación, pero en la práctica esas penalizaciones solo se exigían en casos contados, y no solían superar los mil dólares, según expertos consultados por el Post.