Idaho, EE.UU.- Una papa modificada genéticamente para resistir el patógeno que ocasionó la gran hambruna irlandesa es tan segura como cualquier papa en el mercado, dijo la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus iniciales en inglés).
En una carta dirigida el martes a J.R. Simplot Co., con sede en Idaho, la FDA dijo que la papa no es sustancialmente diferente en composición o seguridad a otros productos que ya están en el mercado, y no suscita ningún cuestionamiento por el que la agencia tuviera que realizar exámenes más rigurosos antes de que sea comercializada.
“Estamos complacidos y esperamos que los consumidores reconozcan los beneficios una vez que sea introducida al mercado el próximo año”, dijo el miércoles Doug Cole, director de comercialización y comunicaciones de la compañía. Antes de que la papa llegue a los consumidores, debe recibir la aprobación de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, señaló Cole; se prevé que eso ocurra en diciembre. El Departamento de Agricultura aprobó la papa en agosto.
La Russet Burbank Generation 2 es la segunda generación de la marca de papas “Innate” de Simplot. Ésta incluye la primera versión de la papa con mayor resistencia a magulladuras, pero contiene menor cantidad de una sustancia química producida a altas temperaturas que en algunos estudios mostró que puede ocasionar cáncer.
La papa de segunda generación incluye además un rasgo adicional que según la compañía permitirá que las papas sean almacenadas a temperaturas más frías durante más tiempo para reducir desperdicio de alimento. Haven Baker, vicepresidente de botánica en Simplot, dijo que el Phytophthora infestans (o mildiu de la papa) que ocasionó la gran hambruna irlandesa, sigue siendo el principal patógeno para las papas en todo el mundo.
“Esto proporcionará protección las 24 horas a campos agrícolas y, por añadidura, tiene el potencial de reducir entre 25 y 45% el uso de pesticida”, señaló Baker.
La resistencia al patógeno proviene de una variedad argentina de papa que produce de manera natural una defensa. “Hay 4.000 especies de papas”, dijo Baker. “Existe una biblioteca inmensa para ayudarnos a mejorar este gran alimento”.