NACIONES UNIDAS. La embajadora de Estados Unidos en Naciones Unidas, Nikki Haley, criticó a los países de África por su “fracaso colectivo” para responder a la amenaza de hambruna que más de 14 millones de personas enfrentan y por nominar a la República Democrática del Congo para un asiento en el máximo órgano de derechos humanos de la ONU pesar de sus graves violaciones en la materia.
Haley dijo que las inminentes hambrunas en el noreste de Nigeria, Somalia y Sudán del Sur son principalmente causadas por los conflictos armados, y que representan “un ejemplo trágico” del fracaso de los gobiernos de esas naciones para abordar las causas y de los combatientes para permitir el acceso de ayuda que alivie el sufrimiento.
Reiteró en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU que en África hay una relación crítica entre las violaciones de derechos humanos y el conflicto. Destacó que cuando las naciones africanas proponen a un país como el Congo para un asiento en el Consejo de Derechos Humanos sólo “hacen más grande el conflicto”.
El consejo votó en junio a favor de mandar expertos internacionales a investigar los abusos y asesinatos en el centro del Congo, donde se han reportado miles de asesinatos y mutilaciones en los últimos meses. Dos expertos de la ONU fueron asesinados en la zona y decenas de fosas comunes se encontraron. Manifestantes pacíficos también han sido detenidos.
Estados Unidos está debatiendo si debería retirarse del consejo con sede en Ginebra, y cuando Haley se dirigió a sus miembros el mes pasado fue muy crítica hacia varios de ellos con malos antecedentes de derechos humanos.
“Este es un momento crucial para el Consejo de Derechos Humanos”, expresó la embajadora. “Tiene el potencial de ser un instrumento para los hombres, las mujeres y los niños que sufren en África hoy día, pero sólo puede jugar su papel si las naciones miembros se comprometen a promover y defender los derechos humanos universales”, agregó.
Señaló que todo depende de que las naciones africanas presenten candidatos creíbles y con buenos antecedentes de derechos humanos. “La nominación (del Congo) es un fracaso inexcusable de este proceso”, puntualizó.
En cuanto a la hambruna, Haley dijo que Estados Unidos prometió 1.400 millones de dólares para ayudar a aquellos amenazados de hambre para el año fiscal de 2017.
“Las personas se están muriendo de hambre, no porque así Dios lo quiera, sino porque lo ha provocado el ser humano”, indicó.
Haley advirtió que el progreso para alcanzar la paz y seguridad en África “no se puede lograr a menos que los esfuerzos de la ONU y de otros estén acompañados por la rendición de cuentas de las partes de los gobiernos involucrados en el conflicto”.