Por: Patricia Solano y Juan Miguel Pérez
El año de la libertad: Después de la dictadura, ¿Qué ha pasado en RD?. Cuando el 14 de julio de 1789 el pueblo francés hizo una revolución para poner fina la monarquía existente y procurar establecer una república que hiciera entrar al Tercer estado (las clases trabajadoras) en la comunidad política nacional, fuerzas conservadoras reaccionaron y trataron por todo los medios de restablecer el viejo régimen, o al menos recuperar parte del poder político e ideológico arrasado por la revolución.

Volver a una monarquía o establecer una república de democracia directa o una representativa; esas eran las opciones que animaban una disputa que duró casi un siglo. Luego de reprimir ferozmente la última gran revuelta revolucionaria del pueblo francés, la Comuna de París de 1871, la aristocracia y la burguesía acordaron el establecimiento de una república conservadora que desde entonces ocupa el poder, con breves excepciones en el tiempo.

En República Dominicana algo parecido ocurrió. En noviembre de 1961 se produjo el alarido de un pueblo que, tirado en las calles, logró sacar a los Trujillo del poder. Los anhelos de justicia social y de participación popular eran inmensos. Pero así de grandes también eran las apetencias de un grupo reducido de dominicanos a los que no les interesaba una democracia auténtica para el país, porque ya tenían sus ojos puestos en el botín que representaban las riquezas de los Trujillo. El Consejo de Estado gobernó con miembros de las clases dirigentes que sustituyeron a las trujillistas en el poder político del país y capturó al Estado dominicano para las mismas.

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En diciembre de 1962, cuando se celebran las primeras elecciones libres, la candidatura de ese mismo grupo, reunido alrededor de la Unión Cívica, pierde las elecciones por una abrumadora mayoría que votó por la opción liberal de Juan Bosch y el PRD de entonces.

De inmediato, al asumir la presidencia el 27 de febrero de 1963, Bosch asume un proceso de democratización de la nación, que pasaba por lo político, lo económico y lo social, desmontando el esquema trujillista que buscó perpetuar la oligarquía nacional para provecho propio. Pero ese proyecto de nación democrática fue intolerable para ese sector, y el 25 de septiembre de ese año, Bosch es derrocado por un golpe militar, dirigido por la reacción dominicana, empresariado e iglesia reunidos, y que contó con el gobierno de los Estados Unidos.

De ahí en adelante, hubo un contra-golpe, donde militares constitucionalistas aliados a Bosch buscaron reponer el orden constitucional, pero una intervención militar norteamericana impidió que la democracia retomara su curso, y auparon la instalación de un gobierno autoritario afecto a sus intereses.

Desde entonces el país ha sido gobernado por un sector conservador que aunque ha permitido una serie de libertades públicas, ha reproducido la concentración extrema de poder político y económico en unas pocas manos, ha ejercido el autoritarismo y ha limitado el grado de participación dela gente en la construcción de la historia.

El camino hacia la democracia dominicana ha encontrado todo tipo de dificultades y hostilidad en esta etapa post-Trujillo. De eso hablaremos en una próxima entrega.