La temporada de vacaciones escolares de los niños resulta el mejor tiempo para hacerles un chequeo médico general rutinario.
Aunque sus hijos se encuentren en perfecto estado de salud, no está de más hacerle una revisión completa durante este tiempo, durante el cual no tienen que levantarse temprano para acudir a clases ni a sus actividades extracurriculares.
La pediatra Kismet Encarnación explicó que el chequeo de todo niño en edad escolar por “sano” que sea, debe hacerse mínimo una vez al año, y qué mejor época que las vacaciones.
Encarnación aseguró que esta es la única manera que tienen tanto los padres como los especialistas de detectar a tiempo alguna enfermedad -aunque sea asintomática- y poderla tratar de la manera correcta.
Por esta razón, entiende que es necesario realizarle las pruebas básicas y de rutina a los niños.
La especialista de la salud asegura que dentro de las analíticas recomendadas suele incluir aquellas que le permitan al especialista valorar de manera general los diferentes sistemas del cuerpo del niño.
Exámenes. Entre las pruebas que recomienda la especialista figuran:
-Hemograma: Permite evaluar tres tipos principales de células sanguíneas: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
Se puede solicitar como parte de un chequeo de rutina o si su hijo está más cansado de lo habitual, parece tener una infección o tiene moretones o hemorragias inexplicables.
-Creatinina y uroanalisis: Con estas pruebas se busca determinar la función renal del menor.
-Electroforesis de hemoglobina: El mismo se realiza para determinar si hay falcemia, la cual es una enfermedad muy frecuente en la población dominicana, según Encarnación.
-Tipificación: Esta prueba, más que para detectar enfermedades, se realiza para determinar qué tipo de sangre tiene una persona.
-Glicemia: Con este examen se busca medir la cantidad de un azúcar (glucosa) en la de sangre del infante.
-Bilirrubina: Este permite evaluar la función hepática.
Pruebas tiroideas: Este tipo de pruebas se utiliza para determinar si la tiroides está funcionando normalmente.
Además de los exámenes antes recomendados, la pediatra exhorta a los padres que acudan con sus niños al odontopediatra para verificar su salud bucal.
Por último, es importante revisar el patrón vacunal para la adecuada orientación familiar y administración de las que hagan falta.
“Si es detectado en el examen físico o durante la historia clínica algo específico y de interés se agregarán los exámenes correspondientes tanto en evaluaciones subespecializadas o análisis complementarios” concluye la especialista.