Hace algunos ayeres el dembow solo se escuchaba tímidamente a lo interno de República Dominicana, influenciado por otros géneros como el rap, reggae y reggaetón, y aunque el ritmo siempre ha sido contagioso, hacer dembow en 1990 no era más que un pasatiempo o una especie de utopía, que germinaba ante la vista de un país que lo discriminaba.

Sin embargo, el tiempo le ha dado la razón a sus exponentes y una muestra de ello fue la dedicatoria que le hiciera la súper estrella puertorriqueña Bad Bunny a la industria local del Dembow el pasado jueves, a propósito de ganarse un Latin Grammy con “Titi me preguntó”, en la categoría de “Mejor canción urbana”, una pieza con influencias del dembow.

“Gracias, este Grammy se lo dedico a la República Dominicana y a todo el movimiento del dembow; a los artistas, productores, bailarines y directores de videos. Gracias por la inspiración. Ese Grammy es para ustedes”, escribió el artista más sobresaliente de la industria urbana vía Twitter.

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Pero más allá de “Titi me preguntó”, “Un verano sin ti”, su último álbum musical, contiene varios ritmos, expresiones, e influencia dominicana.

En ese sentido, el artista Nacho, exintegrante de agrupación Chino y Nacho, “frenó” hace unos días en la popular calle de los coros urbanos, es decir “La 42 de Capotillo”, para grabar un dembow con el popular productor Leo Produciendo.

El puertorriqueño Farruko, uno de los artistas internacionales que más apoyo le ha ofrecido al dembow, también acaba de lanzar la bachata “La envidia”, influenciada por ese género. El video también fue hecho en la popular calle 42.

“La reina del pop”, Madonna, también se subió a la tendencia. Asimismo, el colombiano J. Balvin y la española Rosalía han sido algunas de las estrellas que volaron hasta Santo Domingo, para grabar con artistas y productores locales, en escenarios ambientados en la cultura del “bajo mundo”.

Trascendente

Bad Bunny le dedica un Grammy al país y Nacho y Farruco graban tema en la calle 42 de Capotillo, D.N., influenciados por el “saoco” del Dembo