Tras el colapso del puente de Baltimore, la Casa Blanca dice estar “moviendo cielo y tierra” para que el puerto vuelva a la normalidad, pero Wes Moore, el gobernador del estado de Maryland, dijo que su reapertura tomará tiempo. Este accidente, dicen los expertos, muestra la fragilidad de las construcciones del siglo pasado ante los peligros del presente.
La imagen del gigante buque que derriba la frágil estructura del puente conmovió al mundo entero. El buque Dalí aparecía como un gigante al lado del Francis Scott Key, un puente de acero y concreto construido en los años 1970, que atravesaba el río Patapsco en Baltimore, estado de Maryland. El puente colapsó en cuestión de segundos cuando la embarcación, construida en 2015 en Corea del Sur, se estrelló en uno de sus soportes.
Un buque titánico
“Estamos hablando de un buque Neopanamax, que son capacidades bastante mayores. Las dimensiones son de una eslora de 300 metros, la manga (el ancho) de 48.2 metros y un calado de profundidad de 14.5 metros. Este buque desarrolla una velocidad máxima de 22 nudos, con una capacidad de carga de hasta 10.000 TEUs [unidad de medida equivalente a veinte pies]”, explica a RFI el director de la Escuela de Maquinaria Naval de la Universidad Marítima Internacional de Panamá, Ervin Vargas.
El experto en transportes marítimos también considera que lo sucedido en Baltimore muestra los grandes cambios y desafíos tecnológicos de nuestros tiempos. Los barcos son cada vez más grandes y se requiere por lo tanto una actualización de las infraestructuras. “La tecnología permite que estamos construyendo más buques, podemos transportar mayor mercancía de carga. Entonces también el recinto portuario necesita reactualizarse”, comenta Ervin Vargas.
Evolución en la construcción
Evolución tecnológica por un lado y evolución de los sistemas de seguridad por el otro. Para Manuel Simón-Talero, ingeniero de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid, las actualizaciones de los reglamentos de construcción son cruciales para evitar este tipo de accidentes. Y sobre todo cuando se trata de mega estructuras.
“Los impactos que se consideran ahora en el diseño son de cuantía más elevada porque las normativas se adecuan y los requisitos de diseño se adecuan a la actualidad. Lo mismo pasa con las cargas vehiculares y con las de ferrocarril. Antes no había ferrocarriles de alta velocidad y ahora los hay. Por tanto, las infraestructuras se diseñan para esa alta velocidad. Pues lo mismo para las nuevas acciones, por así decirlo. Pero las antiguas, algunas se han adecuado, supongo, y otras a lo mejor no tanto como pudiera ser, que es el caso de este puente”, detalla el ingeniero.
El colapso del puente de Baltimore podría resultar el mayor pago de un seguro marítimo del que se tenga registro, estimó este jueves la aseguradora británica Lloyd’s of London. Maryland ha pedido una dotación inicial de 60 millones de dólares y el presidente Joe Biden prometió que el Gobierno federal cubriría el costo total de la reconstrucción del puente.