La Enciclopedia Universal define el morbo, como: “atracción hacia lo desagradable y perverso; “atractivo de los desagradable y prohibido”; “enfermedad, alteración de la salud”.
Partiendo de esta definición y visualizando los distintos contenidos que encontramos en las redes sociales, pudiéramos colegir que estamos frente a un problema preocupante y agravante.
Muchas personas en su afán e interés de conseguir seguidores y likes, cuelgan en sus muros informaciones falsas, fotografías de accidentes, hechos violentos, pornografía, muchas veces sin confirmar su veracidad o si el mismo se efectuó en su país de origen.
Es sorprendente como vemos a diario la filmación de peleas entre seres humanos, ante la mirada indiferente y peor aun, bajo la filmación de los espectadores que disfrutan el hecho como algo entretenido.
Es lamentable el ver como personas han convertido sus cuentas en las redes sociales, como almacenes de dolor, supermercados de hechos trágicos, depósitos de crueldad y maldad.
Preocupa la forma con que un gran segmento de la población toma un hecho importante y de gran connotación social, como algo que provoca risa, burla, y que genera un sin numero de memes, que desvirtúan la realidad de una problemática existente.
El uso del WhatsApp, no escapa a esta lamentable situación, ya que a diarios recibimos noticias, videos, imágenes de hechos lamentables, trágicos, pornografía y un sin numero de informaciones que en nada aportan a la sociedad, y muchas veces dejan entrever la calidad humana de quien la envía o la reproduce.
Seamos cautos e inteligentes a la hora de publica, recibir y reenviar una información que atente contra el pudor, la moral y la imagen de una persona o de un conglomerado social, no seamos parte y cómplice de la morbosidad en las redes sociales.