El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este miércoles con una bajada del 6,30 %, hasta los 102,62 dólares el barril, caída que se registra horas antes de que el presidente de EE. UU., Joe Biden, solicite una suspensión de julio a septiembre del impuesto federal a la gasolina.
A las 09.00 hora local de Nueva York (13.00 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en agosto restaban 6,90 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior.
Según adelantaron los medios locales, Biden podría solicitar hoy al Congreso que dé luz verde a una suspensión de tres meses del impuesto federal de 18,4 centavos por galón sobre la gasolina y pida a los estados que suspendan sus impuestos sobre el combustible.
El petróleo de Texas abre con una bajada del 1,29 %, hasta 116,07 dólares
Desde que empezó la guerra en Ucrania, hace casi cuatro meses, los precios de la energía subieron y se mantuvieron cerca de niveles históricamente altos, ya que la invasión de Ucrania por parte de Rusia ha provocado que las naciones occidentales hayan ido reduciendo cada vez más los suministros de Moscú.
“Este es un recordatorio para los mercados de que es poco probable que los gobiernos se queden sentados y acepten precios del petróleo más altos”, dijo Edward Park, director de inversiones de la firma de inversiones del Reino Unido Brooks Macdonald, a The Wall Street Journal.
El petróleo de Texas abre con una bajada del 1,4 %, hasta 118,97 dólares
No obstante, ese impuesto depende del Congreso, que es el que en última instancia tendría que aprobar la suspensión temporal.
En ocasiones anteriores, los republicanos se han opuesto a quitar este impuesto a la gasolina e incluso algunos demócratas no han estado de acuerdo con la idea.
Por otra parte, la Casa Blanca invitó a los directores ejecutivos de siete compañías petroleras a una reunión esta semana para discutir formas de aumentar la capacidad de producción y reducir los precios del combustible en alrededor de 5 dólares por galón.
Chevron respondió ayer a Biden instándole a colaborar con las petroleras y no «demonizarlas» ante su creciente campaña de presión para que produzcan más combustible y bajen los precios.
Petróleo de Texas baja un 0,43 % y abre en 121,58 dólares el barril