El Presupuesto General del Estado para el 2019 será de RD$921,810 millones, es decir, 105,245 millones mayor que el presupuesto de 2018, que de acuerdo a Ley de presupuesto el 10 por ciento pertenece a los municipios, porcentaje que no se otorga a la municipalidad.

En este año que casi finaliza y la municipalidad recibió un total de RD$17, 006,393, 448.96, de los cuales RD$16,157, 080, 878.00 a los ayuntamientos y RD$849, 312,570.96 para la Liga Municipal Dominicana de un presupuesto general para el 2018 de RD$814,821 millones, lo que no representa el 10 por ciento del presupuesto nacional.

El próximo viernes 30 la Liga Municipal Dominicana ha convocado a la asamblea anual de municipios para la aprobación de su presupuesto del 2019, un presupuesto que demanda más asignación.

Desde hace años el gobierno central viene haciendo restricciones a las partida otorgada a la municipalidad, que necesita de una mayor partida presupuestaria, una municipalidad que requiere de recursos para las obras y servicios como es el caso de los bomberos que dependen de los ayuntamientos.

La restricción financiera priva a los gobiernos locales de capacidad para ejecutar acciones y obras de interés para los municipios y el Gobierno Central asume el protagonismo.

El Gobierno Central recorta los presupuestos municipales alegando insuficiencia de ingresos, pero asume la construcción y arreglo de calles y otra infraestructura, quedándose con el capital político del protagonismo que se deriva de las realizaciones.

Existe una ley que determina la proporción de los ingresos internos que debe ser asignada a los ayuntamientos, pero muy pocas veces se ha cumplido.

Generalmente, la Federación Dominicana de Municipios tiene que negociar con el Poder Ejecutivo para lograr aumentos en las asignaciones presupuestarias, y no siempre tiene éxito. La situación perjudica seriamente el desempeño de esos gobiernos.

Los ayuntamientos tienen compromisos con sus comunidades. Deben cumplir el mandato constitucional de elaborar presupuestos participativos para que las comunidades propongan las obras que necesitan. Si no cuentan con los recursos que les acuerda la ley, no pueden planificar su ejercicio.

El Gobierno está en el deber de cumplir la Ley 166-03 y al mismo tiempo mejorar la fiscalización de los gastos de los ayuntamientos y pedir rendición de cuentas sobre las ejecuciones de cada uno.

El Articulo 6, de esa ley estable que: La Liga Municipal Dominicana percibirá para atender los gastos de su funcionamiento operativo y el cumplimiento de sus fines de asesoría y consultoría técnica y de planificación el cero punto ocho por ciento (0.8 %) de la cantidad que se destine en la Ley de Presupuesto de Ingresos y Gastos Públicos de la Nación a los Municipios y Distritos Municipales, la cual se deducirá del monto total que se le asigne a éstos.

A esa falta de recursos por el Poder Ejecutivo, le sumamos el llamado que hace el presidente de la Federación Dominicana de Municipios (Fedomu), Rafael Hidalgo, de que los elevados precios de los combustibles, repuestos y materiales de construcción, los ayuntamientos quedarían prácticamente paralizados y en vez de administrar soluciones, administrarán problemas si el Gobierno central no aumenta el presupuesto de los gobiernos locales para el próximo año.

Se estipula que para el próximo año 2019 apenas los cabildos recibirán el 2.39% del 10% que se establece constitucionalmente en el Presupuesto General, que sería precario para la municipalidad, sobre todo porque los precios de los insumos que se utilizan para ofrecer los servicios se han disparado.