Es vox populis en los corrillos políticos que el Partido Revolucionario Moderno (PRM) ganará las elecciones municipales del domingo 18 de febrero.
Las razones subyacen en el apoyo económico sin precedentes que Luis Abinader ha conferido a los 158 alcaldías y 235 distritos municipales diseminados por la geografía nacional, sin considerar que el incúmbente sea oficialista u opositor, además del trato personal que el mandatario concede a cada alcalde o alcaldesa, elevando de ese modo la trascendencia institucional del Poder Municipal.
Abinader entregó una partida presupuestaria de RD$4,000 mil millones a la Liga Municipal Dominicana (LMD), que esta distribuyó entre todas las alcaldías y distritos municipales, conforme a tamaño poblacional y necesidades de obras de infraestructura con la finalidad de que construyeran aceras, contenes, funerarias, cementerios, mercados y cualquiera otra obra municipal importante. Añádase, $1,200 millones adicionales para asfaltado y $388.0 millones para el programa Vivir la Alegría de la Navidad, ejecutado el año pasado. El mandatario le ha dado calor a la asociatividad municipal reuniéndose durante tres años consecutivos con la poderosa Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU), la Asociación de Distritos Municipales (ADODIM) y otras entidades del sector, actitud que contrasta con la postura de los ex presidentes Leonel Fernández y Danilo Medina, quienes durante su ejercicio conjunto de 20 años jamás se reunieron de manera institucional o colectivamente con los alcaldes.
Puede leer: Ley 1-24 del DNI: calamidad legislativa
Los resultados políticos de la cooperación Abinader-Alcaldías no se han hecho esperar y, para muestra, basta señalar que el PRM cuenta actualmente con 106 alcaldes, de los cuales solo ganó 86 en los comicios del 2020, pero ha ganado otros 20 en la presente gestión de renunciantes opositores, quienes engrosaron las filas del partido oficial. Un aliado del PRM, el Partido Justicia Social, aporta dos alcaldes adicionales. Igualmente, en las pasadas elecciones el PRM obtuvo 96 distritos municipales, pero ahora posee 142 de los 235 existentes en el país.
En suma, la oposición PLD-Fuerza del Pueblo controla 50 alcaldías y 93 distritos municipales. Ambas pujanzas, antagónicas entre sí, han quedado expuestas a sufrir una derrota municipal mayor a la vivida hace cuatro años. Finalmente, el ambiente electoral es diferente al prevaleciente en las municipales del 2020, aquella suspendida debido a un inadecuado manejo técnico del Centro de Cómputos de la JCE, causa de conmoción política en medio del desastre divisionista montado por Leonel Fernández y Danilo Medina.