El pasado domingo 28 participamos como parte de los periodistas y/o comunicadores invitados a la actividad que para tributarle su apoyo al Presidente Luis Abinader, llevara a cabo en el Coliseo Teo Cruz de la ciudad Capital, el Comando de los Frentes Sectoriales del Partido Revolucionario Moderno (PRM), que preside a nivel nacional, el dirigente y catedrático Universitario, Freddy Fernández.

Por cuestiones estratégicas y luego de llamar a la colega y amiga Domi García Saleta, la cual junto al equipo de prensa del Palacio Nacional, estaba dentro de la parte organizativa para brindarle a los profesionales de la comunicación que asistiríamos todas y cada una de las facilidades para hacer mejor el trabajo, acción que de plano rechacé, pues, en nuestra calidad además de politólogo, preferimos, más que como periodista, sentarnos en una de las butacas del segundo nivel desde un espacio en donde le daría seguimiento a lo que como observador pretendía: tener de manera visual una idea un poco más acabada sobre lo que sospechaba iba a ser una actividad que bien pudiera dejar satisfecha mi curiosidad de su éxito o su fracaso.

Debo confesar que no aplaudí, pues recuerdo que en una conversación que el fenecido director de El Nacional sostenía con uno de los periodista de la redacción, escuché clarito cuando don Radhames Gómez Pepín y a manera que consideré un boche, le dijo a uno de los periodistas bajo su mando que los periodistas íbamos a las actividades no a sonreírles a las causas que se enarbolan, ni a aplaudir, sino a tomar notas y llevarle el mensaje a la sociedad de manera objetiva, y así, y aunque esas recomendaciones no eran para mí, la he tomado como escudo para guardar mis emociones o mi simpatía.

Desde el asiento que ocupaba, escuché el discurso de Freddy Fernández, el cual de manera disciplinada y atendiendo a lo que son las básicas reglas de una disertación con los parámetros justo de lo que se esperaba en dicho acto, el aguerrido salcedense, supo sacarle a los presentes aplausos y arengas reeleccionistas, los cuales más que otras cosas y de seguro estoy, hicieron sentir satisfecho al primer mandatario de la nación, al que desde mi butaca observé una vez más, seguro del camino que transcurre en estos días ya finales del presente certamen electoral.

Seguía observando, y como ausente de mí mismo, pero concentrado desde mi “lejano” asiento desde donde tenía una vista panorámica de prácticamente más de 200 grados, escuché atento, pero muy atento los discursos de Carolina y Paliza, quienes y al igual que el Presidente Luis Abinader, combinaron sus alocuciones para no solo darle las gracias al batallador responsable por las causas del PRM, Freddy Fernández, sino, que hasta suculentos piropos escuché de parte de estos, quienes y de manera pública reconocieron el amplio poder de convocatoria que tiene este muchacho proveniente de una de las lomas más encumbradas de Salcedo y que gracias a sus estudios y trabajo por las causas que dice defender, ha llegado hasta la privilegiada posición política –organizativa en donde se encuentra.

Finalmente, y me permitirán textualizar mi recuento del pasado domingo, con palabras del presidente, quien en su discurso al reconocer el éxito de dicha actividad y haciendo galas de sus dotes oratorias y con un dominio escénico que casi se le sale de control al ver a tantas personas congregadas allí, dijo:

“Nosotros tenemos lo que muchos llaman un problema feliz, que es, que todo el mundo sabes, cuál va a ser el resultado de las elecciones, y por qué un problema feliz?, porque hay muchos compañeros, compañeras, simpatizantes, amigos y amigas, que dicen que las elecciones ya se sabe cuál va a ser el resultado, y es verdad, pero también es la verdad que no se puede quedar nadie sin ir a votar”.

“Freddy, felicidades, y a todos los presidentes y secretarios por el gran trabajo. Ahora, ese trabajos que hicieron por estos años, llévenlo a votar, llevenlos a las urnas el próximo 19 de mayo, para que entonces se pueda confirmar, que en los próximos años, viene más transparencia, más empleos, salud, más seguridad, más educación y mucho más trabajo a favor del pueblo. Que Dios bendiga la República Dominicana”.