Ammán.- El primer ministro jordano, Hani al Mulqui, presentó hoy su dimisión al rey, como está previsto tras la celebración de elecciones legislativas, y Abdalá II le encargó la formación de un nuevo Ejecutivo con una línea continuista.
Al Mulqui presentó su dimisión después de las elecciones parlamentarias del pasado 20 de septiembre, por las que se renovará el parlamento, que tendrá que dar su confianza a un nuevo Gobierno.
Pero el rey jordano pidió a Al Mulqui que continúe al frente del Ejecutivo para proseguir el programa de reformas económicas, la aplicación del Estado de derecho y «la lucha contra el terrorismo en la defensa del islam y en contra del odio, del sectarismo, de la violencia y del pensamiento destructivo», según un comunicado de la Casa Real.
Tras los comicios del pasado martes, la nueva Cámara de Representantes contará con una mayoría a favor de las autoridades jordanas, gracias a la elección de candidatos por sus vínculos tribales o económicos.
La alianza encabezada por el islamista Frente de Acción Islámica (FAI), el brazo político de los Hermanos Musulmanes jordanos, logró 15 de los 130 asientos del Parlamento jordano, convirtiéndose en el mayor bloque parlamentario.
El FAI concurrió a los comicios en el marco de la Alianza Nacional por la Reforma (ANR), la cual expresó su deseo de colaborar con otros diputados para ejercer «un control efectivo» sobre el futuro gobierno y lograr reformas políticas en Jordania.
Al Mulqui fue nombrado primer ministro el pasado 1 de junio y sustituyó a Abdalá Ensur al frente de un Gabinete más tecnócrata y centrado en las políticas económicas, aunque mantuvo a varios ministros del Gobierno anterior.