Rueda de prensa en el Hospital Robert Reid Cabral, donde el nuevo director del hospital dio declaraciones de como encontró la administración del hospital, a su ves se quejó de encontrar el centro de salud con la deuda más grande nunca antes vista , por lo que presenta problemas con los suplidores , también dice que encontró la mayoría de los monitores y ventiladores dañados. Hoy/ Arlenis Castillo/04/10/2020.
Mientras aumenta la asistencia de pacientes a las áreas de emergencia y consultas en el hospital infantil Robert Reid Cabral, los suplidores tienen paralizado el suministro de insumos debido a la deuda de casi 150 millones de pesos, mientras equipos fundamentales para estudios se encuentran averiados.
Debido a la situación, el director del principal hospital infantil, Clemente Terrero, reiteró la pertinencia de declarar a ese centro en estado de emergencia, para que el gobierno asuma parte o el total de la deuda, ya que el presupuesto que recibe apenas alcanza para los servicios básicos.
El funcionario considera que la deuda, de alrededor de 150 millones de pesos, es la más alta en la historia del hospital Robert Reid, por lo que los suplidores se resisten a seguir despachando los insumos, indispensables para ofrecer servicios de salud de calidad.
Precisó que entre los insumos más afectados por la crisis financiera están los de laboratorio, por lo que han tenido que hacer malabares para que este departamento continúe operando, ya que es esencial en un centro asistencial como este.
“Para poder mantener los laboratorios hemos tenido que abonar parte de la deuda a los suplidores, pero ya no aguantamos más”, sostuvo el especialista en infectología. Se encuentran cerradas salas de vital importancia, como Aislamiento, donde existen 36 camas; la Sala 326, para varones, con diez camas, que ayer se procedía a su apertura; la de Neumología y otras.
El Robert Reid cuenta con 31 ventiladores, pero solamente funcionan 15 en los actuales momentos, lo que el doctor Terreno estima sumamente grave en un centro nacional como ese hospital.
De igual modo, todos los monitores se encuentran dañados, instrumentos básicos en el área de urgencia. Aunque el tomógrafo fue rehabilitado, este equipo no funciona porque el UPS no está apto para ofrecer servicios si falla la energía eléctrica.
“Este aparato tiene alrededor de dos años dañado y cuesta alrededor de 900 mil pesos, y estamos trabajando para ver cómo lo podemos licitar en lo inmediato”, explicó.
Aclaró que llamó la atención sobre el estado del hospital para que la población se entere y no acuse a las autoridades del centro en caso de que ocurra una situación negativa.
Con el pedido de declaratoria de emergencia lo que busca es que el gobierno, a través del Servicio Nacional de Salud, ayude asumiendo la deuda o parte de ella para que el hospital sigua operando.
El presupuesto mensual del hospital Robert Reid es de 7.9 millones de pesos, de los cuales casi 3 millones se quedan en Promese.
El hospital cuenta con 275 camas, y a pesar de las precariedades la dirección trata de habilitar 28 para sumar 300 unidades.