La Guardia Revolucionaria de Irán confirmó este martes el lanzamiento de misiles contra Israel como respuesta a los asesinatos del líder del grupo terrorista palestino Hamas, Ismail Haniyeh, el jefe del grupo terrorista libanés Hezbollah, Hassan Nasrallah, y un general iraní.
“Con el disparo de decenas de misiles balísticos, se ha golpeado los objetivos en el corazón de los territorios ocupados”, indicó el cuerpo militar de élite en un comunicado, en el que clarificó que la operación es una respuesta a las muertes de Haniyeh y Nasrallah. “Advertimos que si el régimen sionista responde militarmente a esta operación será contraatacado de manera más contundente”, añadió la Guardia Revolucionaria iraní.
Medios iraníes como la agencia estatal IRNA publicaron videos de imágenes de misiles cruzando los cielos del país en ciudades como Teherán, Isfahán, Shiraz o Tabriz, unas imágenes que se repitieron en redes sociales.
La Misión de Irán ante la ONU calificó en un comunicado el ataque como una respuesta “legal, racional y legítima a los actos terroristas del régimen sionista contra ciudadanos e intereses iraníes y por infringir la soberanía de la República Islámica”.
Aconsejó además a los “Estados regionales y a los aliados” de Israel que se alejen de Israel.
La televisión estatal IRIB celebró el ataque con un locutor que afirmaba “los sacarán de sus casas y los castigarán, los judíos serán castigados” mientras se emitían imágenes del ataque.
El Ejército israelí anunció poco antes el ataque y las alarmas antiaéreas sonaron en todo el país. El vocero militar Daniel Hagari dijo que se logró interceptar un gran número de misiles disparados por Irán y advirtió que “hubo algunos impactos en el centro y en otras zonas del sur del país”.
Irán comunicó que respondió así a la muerte de Haniyeh en Teherán durante la toma de posesión del presidente de Irán, Masud Pezeshkian, a finales de julio y al asesinato de Nasrallah y el general de brigada de la Guardia Revolucionaria iraní Abbas Nilforushan en bombardeos israelíes en Beirut el pasado viernes.
Teherán había prometido en repetidas ocasiones vengarse de Israel por la muerte de Haniyeh y sin embargo había guardado relativo silencio acerca de Nasrallah, líder del grupo chiíta Hezbollah, uno de sus aliados más cercanos.
Este es el primer ataque de Irán contra Israel desde abril, cuando atacó con misiles y drones dos bases aéreas israelíes como respuesta a la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria en el consulado iraní de Damasco, en un ataque que no provocó grandes daños.