Al margen del compromiso de Odebrecht de resarcir al Estado Dominicano con US$184 millones y la paralización temporal de ese Consorcio para la contratación de nuevas obras en el país, las investigaciones que realiza el Ministerio Público para determinar el destino de los US$92 millones que esa empresa pagó como sobornos aquí, han caído en una rutina donde todos los investigados afirman no saber nada de nada.
Mientras en países como Perú, Colombia y Panamá, donde igual que en República Dominicana Odebrecht pagó “coimas” para obtener la concesión de obras públicas, ya hay exfuncionarios y exlegisladores bajo arresto por corrupción en contratos, las autoridades del país continúan esperando que sea el consorcio brasileño quien le suministre los nombres de beneficiarios.
El desfile. Hasta ayer 18 exfuncionarios habían declarado por ante el procurador general, Jean Rodríguez, y la titular de la Procuraduría Especializada contra la Corrupción Administrativa (PEPCA), Laura Guerrero Pelletier, desde que el pasado 21 de diciembre iniciaran los interrogatorios sobre el caso de corrupción más sonado de los últimos tiempo en República Dominicana.
A todos se les requiere decir lo que saben sobre los 17 contratos aprobados en el Congreso Nacional a Odebrechet durante el período 2002-2014, y por lo que el consorcio brasileño reveló haber pagado US$92 millones en sobornos a través de intermediarios, obteniendo ganancias por US$163 millones.
El dato más valioso lo ha aportado Marcelo HofEke, gerente general de Odebrecht en el país, al revelar que el dinero de los sobornos lo habría recibido el empresario y gerente de negocios de la empresa, Ángel Rondón.
Todo lo demás ha sido depósito de contratos, facturas y otros documentos que, para detectar el ilícito que se investiga, no aportan nada.
Como pilatos. Rondón fue investigado y negó la especie asegurando que cobró a Odebrecht aproximadamente US$92 millones, “pero como pago por sus servicios en un contrato de representación comercial, jamás para comprar conciencia ni nada por el estilo”.
Se presume que las autoridades del MP están validando los documentos que le fueron requeridos como prueba de la licitud de esos recursos, pues desde que fue interrogado el 11 de enero en curso, se le vio una segunda vez en la Procuraduría, pero se desconoce el nivel de la investigación sobre él.
Rondón es un próspero empresario de la industria láctea en el país, dueño de Agroindustria Los Ángeles donde se produce el queso Patrón de Oro; y accionista mayoritario de la empresa AAA Dominicana, entre otros negocios. En el 2010 fue condenado por evasión de impuestos por el Tribunal Superior Administrativo (TSA).