Pascual Calzado Castillo y José Luis Castillo dicen lo que se busca es chantajearlos y crear un escándalo mediático con sus terrenos

La litis por los terrenos en El Bonito de San Isidro, en la parcela 17A, continuó ayer con la versión dada por Pascual Calzado Castillo, quien reclama los terrenos de su propiedad.

“Yo soy hijo de una de las dueñas, Mariana Castillo de los Santos. Aquí lo que está sucediendo es que el dueño es quien está entrando en su propiedad”, dijo Calzado Castillo.

Según explicó, como la propiedad está a nombre de las familias De los Santos Escoto, los particulares interpretaron que él no tenía nada que ver con esos terrenos.

“Mi mamá hereda por su mamá, por lo que el apellido se pierde. Incluso regaron el rumor de que la verdadera dueña es Blasina de los Santos Escoto, que sucede que es mi abuela y murió en el 1978”.

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Calzado Castillo mostró un fardo de documentos que posee, entre los que estaba una autorización de desalojo que le dió en el 2006 el abogado del Estado, Casilla Minaya, las notificaciones del deslinde que notificó a la Fuerza Aérea y los que actualmente están ocupando. También presentó las cartas anotadas de los títulos que heredó, el certificado de título madre, los que emitió el Tribunal de Tierras y las certificaciones del estado actual del inmueble, que suma algo más de 27,400 metros cuadrados.

Aseguró que las personas que ocupan el terreno no tienen ningún derecho y que solo se basan en que la Aviación los ubicó ahí, pero que no es cierto. Calzado Castillo invitó a los ocupantes a acudir a la Jurisdicción Inmobiliaria, a consultar y verificar todo lo que él presentó. Advirtió que es un asunto de derecho lo que sucede, y retó a demostrar a quien se sienta con derecho en su parcela. “Mi mamá me pidió que quería morir en su tierra, y por eso estoy luchando”, dijo.

Sobre la venta del terreno a FAD

José Luis Castillo, hermano de crianza de Pascual, recordó que en 1958 hubo una venta a Trujillo, para la Fuerza Aérea, mudar del cementerio y construir lo que es el Centro de El Bonito. Eran 13 hectáreas de las 40 que poseía la familia. Dijo que ahora algunos de los invasores lo que quieren es que él les pague una millonada para salir de su terreno.