Una tragedia sacudió este miércoles a la comunidad de San Francisco de Macorís, cuando un hombre fue acusado de asesinar a su madre y a su hija menor de edad, además de herir a su esposa y a otra de sus hijas con un machete.
El presunto agresor fue identificado como Eddy de Jesús Camarena, mientras que las víctimas mortales son su madre y su hija Elizabeth Camarena Gómez. En el ataque también resultaron heridas Edilenny Camarena, quien logró escapar, y Erenice Gómez, esposa del acusado.
El antecedente del conflicto
Vecinos de la zona relataron que días antes del hecho, Camarena había discutido con su madre, acusándola de supuestamente haberle hecho «brujería» y exigiéndole que se la quitara.
«Él fue a ponerse con la mamá, a decir que la mamá le había echado una brujería, que le había hecho un daño, que tenía que quitárselo. Entonces después salió con el mismo diablo que llevaba, y mira lo que hace», declaró el señor Ramón Peralta, residente del sector.
Peralta describió a la madre del acusado como una mujer trabajadora y seria. «Pero Juana no se ponía a eso, Juana no. Estamos lamentados nosotros. Esa pobre mujercita, la que está cortada, siempre trabajaba en la finca, haciendo lo que sea, muy de trabajo y muy seria», detalló.
El momento del arresto
De acuerdo con testigos, tras el crimen, Camarena se despojó de su ropa al momento de la llegada de la Policía Nacional. «Cuando la Policía llegó, ahí se desnudó. Él no dijo nada, de una vez la Policía lo agarró y lo tiró en la guagua», explicó Félix Almonte.
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Otro residente, Andrés Santos, señaló que el acusado utilizó un machete para atacar a sus familiares. «Él lo que hizo fue que acabó con la familia de él, su propia mamá, picoti’a», dijo, agregando que también hirió a su esposa y a su otra hija en la frente con el arma.
Perfil del acusado y reacción de la comunidad
Algunos conocidos de Camarena manifestaron su sorpresa ante lo ocurrido. Un compañero de trabajo mencionó que el martes el acusado no quiso cumplir con sus labores y que este miércoles, antes del crimen, se presentó como de costumbre. «Él fue ayer y no quiso hacer nada en el trabajo. Hoy llegó normal y como a las 9:00 de la mañana, se escapó», relató.
Por su parte, Francisco, propietario de una tienda de celulares y cliente frecuente del acusado, expresó su incredulidad. «Él era cliente mío, una persona normal, tranquila, pasiva. Me dieron la noticia y no lo creía. Algo pasó ahí grave que se armó una discusión tan fuerte que llegó a ese extremo», comentó.
En un video que circula en redes sociales, se observa a Camarena mientras es custodiado por agentes policiales. Durante su traslado, se tocaba la cabeza y pronunciaba frases incoherentes.
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