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ARCHIVO - El príncipe Enrique y su esposa Meghan, duquesa de Sussex, salen del servicio de acción de gracias para la reina Isabel II en la Catedral de San Pablo, en Londres, el 3 de junio de 2022. Enrique ganó la primera etapa de una demanda por difamación contra el editor del periódico británico Mail on Sunday, luego que un juez dictaminó el viernes que partes de un artículo sobre su lucha por la protección policial en el Reino Unido eran difamatorias. (Foto AP/Alberto Pezzali, archivo)
LONDRES — El príncipe Enrique ganó la primera etapa de una demanda por difamación contra el editor del periódico británico Mail on Sunday, luego de que un juez falló el viernes que partes de un artículo sobre su lucha por la protección policial en el Reino Unido eran difamatorias.
El juez del Tribunal Superior, Matthew Nicklin, aún no ha considerado cuestiones como si la historia era precisa o de interés público, defensas que la publicación podrá argumentar en la siguiente fase del proceso.
La demanda gira en torno a la cobertura del periódico de una acción separada del Tribunal Superior que Enrique presentó en un esfuerzo por obligar a las autoridades a brindar protección policial al príncipe y su familia cuando están en el Reino Unido. El gobierno retiró la protección de la familia durante las 24 horas del día cuando Enrique y su esposa Meghan renunciaron a los deberes reales de primera línea y se mudaron a California.
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El 20 de febrero de 2022, el Mail on Sunday informó que Enrique buscó una “orden de confidencialidad de gran alcance” para mantener en secreto los detalles de su acción contra el gobierno. A pesar de las declaraciones públicas de sus asesores de que el príncipe siempre había estado dispuesto a pagar por la protección policial, esa oferta no se hizo en su intento inicial de anular la decisión del gobierno, dijo el periódico.
Enrique afirma que el Mail on Sunday lo calumnió cuando insinuó que había mentido en sus declaraciones públicas iniciales sobre la demanda contra el gobierno y que “cínicamente” trató de confundir al público al autorizar a sus representantes a publicar “declaraciones falsas y engañosas” sobre su disposición a pagar por la protección policial.
Nicklin sentenció que el “sentido natural u ordinario” del artículo era difamatorio, pero enfatizó que la decisión no se aplica a otros asuntos en el caso.
“Esta es en gran medida la primera fase en una demanda por difamación”, escribió el juez en su decisión. “El próximo paso será que el demandado presente una defensa a la demanda. Será cuestión de determinar más adelante en el procedimiento si la demanda prospera o no, y en caso afirmativo sobre qué base”.
