Juan Carlos Mejía Aquino 
Wilson Camacho, titular de la PEPCA, valora disposición del tribunal.
La medida de coerción de 18 meses impuesta al general Julio Camilo de los Santos Viola, implicado en el caso Coral 5G, fue impuesta en forma proporcional a los hechos de presunta corrupción que se le imputan, lo que contradice la versión de la defensa del imputado sobre una presunta complicidad de la jueza.
Así respondió el procurador adjunto Wilson Camacho, titular de la Dirección de Persecución de la Corrupción (PEPCA), ante la pregunta de periodistas sobre las declaraciones de los abogados del alto militar, en torno a una supuesta afinidad de la jueza Kenya Romero con la línea de la Procuraduría.
«Esta es la medida de coerción proporcional y que procede, y procede de cara a la gravedad de los hechos que han sido imputado por el Ministerio Público; pero además a la contundencia de las pruebas y a la abundancia de las pruebas presentadas», puntualizó.
Calificó como pírrico los resultados presentados por los abogados del acusado y citó que alguna defensa se dedica a plantear presupuestos irracionales para «luego, cuando los jueces imponen la racionalidad, entonces salir a criticarlos«.
¿Papel carbón? El abogado Julio Cury, de la barra de la defensa de De los Santos Viola, cuestionó la medida impuesta a su defendido, al tiempo que acusó a la magistrada Romero de ser «papel carbón» de la petición del Ministerio Público.
Afirmó que es más que obvia la presunta disposición de la magistrada a poner la medida de coerción más gravosa «a todo lo que huela» al expresidente de la República Danilo Medina.
Afirmó que es más que obvia la presunta disposición de la magistrada a poner la medida de coerción más gravosa «a todo lo que huela» al expresidente de la República Danilo Medina.
«Es una anillo, un circuito de jueces cerrados alrededor del Ministerio Público«, indicó.
