Desde su primera aparición en los comics en 1938, Superman se convirtió en un emblema del pueblo estadounidense. Para los niños, la idea de volar por los cielos y tener superfuerza era suficiente para soñar con ser este personaje, mientras que muchos adultos veían en el kriptoniano con la S en el pecho un símbolo de justicia y los verdaderos valores del estadounidense promedio.
Para 1948, la primera serie de Superman llegó a la televisión. Por supuesto, el mundo no tuvo que esperar demasiado para que Superman hiciera su salto a la pantalla grande, y aunque gran parte de su paso por ambos medios ha sido un rotundo éxito, detrás de cámaras se han vivido un sin fin de circunstancias que apuntarían a una sola conclusión: Superman está maldito.
George Reeves: el inicio de la maldición
Antes de George Reeves hubo dos personas que interpretaron a Superman: Kirk Alyn en las cintas Superman de 1948y Atom Man vs. Superman de 1950 y Bud Collyer prestando su voz en series animadas y programas de radio. Alyn desapareció del mundo del entretenimiento poco después de interpretar al hombre de acero muriendo en el anonimato a sus 88 años, mientras que Collyer tuvo una prolífica carrera en la radio y en la televisión por varios años más después del hombre de acero.
Sería Reeves el que comenzaría con la serie de acontecimientos que confirmarían una especie de maldición en torno a la figura de Superman. George interpretó al hombre de acero entre 1951 y 1958. Desde un principio, el actor tuvo sus dudas de darle vida a Superman, pues para entonces se consideraba que la televisión no era un medio lo suficientemente serio como para que un actor pudiera destacarse. Al final aceptó y el programa fue tan exitoso que Reeves disfrutó de fama internacional.
En 1959, una nueva temporada había sido confirmada, así como el regreso de George en el papel de Superman. Sin embargo, el 16 de junio de aquel año, George Reeves fue encontrado sin vida en su casa de Benedict Canyon en Los Ángeles. La versión oficial de las autoridades aseguró que el actor se había suicidado, pero investigaciones extra oficiales encontraron varias inconsistencias en esta versión.
Reeves había muerto por un tiro en la cabeza, pero el arma con el que fue encontrado el cuerpo no tenía huellas digitales, ni siquiera del mismo Reeves. La bala que habría perforado el cráneo de George fue encontrada abajo del cuerpo sin vida del actor, además de que el arma fue encontrada a sus pies.
Teorías posteriores aseguraron que fue Toni Mannix, pareja de George, la que mandó a matar al actor después de que este rompiera con ella. El misterio de la muerte de George Reeves sería la primer desgracia que rodearía a los intérpretes de Superman y los involucrados de sus películas.
La era Christopher Reeve y las víctimas de Superman
La segunda mitad del siglo XX trajo consigo una revolución completa en la industria de Hollywood. En el cine y la televisión comenzaron a desarrollarse producciones mucho más complejas con presupuestos multimillonarios que generarían ganancias aún mayores, además de una verdadera conexión con el público que en muchos casos trascendió en el tiempo.
Tal fue el caso del Superman interpretado por Christopher Reeve, que a lo largo de cuatro películas, hizo que la figura del superhéroe dejara de ser exclusivo de los niños obsesionados con las historietas a convertirlo en un verdadero fenómeno cinematográfico.
Para muchos, Christopher Reeve ha sido el actor que mejor ha recreado a Superman en el cine, ya sea salvando el mundo de Lex Luthor y Zod o como su alter ego Clark Kent, el tímido periodista enamorado de Lois Lane. Reeve interpretó a Superman de 1978 a 1987, y posterior a este, tuvo una prolífica carrera en el cine hasta el año 1995, cuando su vida cambió para siempre.
El 27 de mayo, Reeve se encontraba participando en un concurso de equitación cuando tras intentar superar un obstáculo se cayó de cabeza del caballo, lo que resultó en la fractura de dos vértebras cervicales y una grave lesión en la médula espinal. A partir de ese día, Christopher Reeve perdió la movilidad de todo su cuerpo a excepción de los dedos que la mano izquierda, quedando en una silla de ruedas por el resto de su vida.
A pesar de su condición, Reeve continuó con su carrera actoral, haciendo incluso un cameo en la serie Smallville que narraba los inicios de Superman. Paralelamente, dedicó gran parte de su vida al activismo y la filantropía.
Christopher Reeve no fue el único que sufrió las consecuencias de convertirse en Superman. Margot Kidder, quien interpretó a Lois Lane durante la época de Reeve, fue diagnosticada con trastorno bipolar. En 1996, tan sólo un año después del accidente de Reeve, Margot asguró que la CIA y su esposo querían asesinarla. Poco después tuvo un episodio de amnesia extraviándose durante varios días y siendo encontrada en el jardín de su casa.
En 2002, Margot Kidder sufrió un accidente de auto del cual logró salir con vida pero con una fractura de pelvis. Murió en 2018 tras una sobredosis de alcohol en lo que se especuló fue un suicidio.
Marlon Brando, quien dio vida a al padre de Superman, tuvo una turbulenta vida familiar, con su hijo siendo encarcelado tras asesinar al novio de su hermana. Sufrió una fuerte depresión después de que su hija, Cheyenne, se quitara la vida; falleció en 2004 tras una fibrosis pulmonar.
Lee Quiqley, el bebé que interpretó a Kal-el antes de partir a la Tierra, murió a los 14 años después de haber inhalado sustancias tóxicas.
La era Reeve fue en la que más víctimas de la maldición hubo, pero con los años, nuevas historias trágicas se escribirían en torno a Superman.
El culto de Smallville
En 2001, la historia de los inicios de Clark Kent/Kal-El antes de convertirse en Superman llegó a la televisión con una gran acogida de parte del público. Tanto su protagonista, Tom Welling, como el resto del equipo tuvo un éxito moderado en sus carreras y ningún accidente fatal se vivió en el ródaje. Parecía que la supuesta maldición había desaparecido, pero en 2019, la serie volvió a dar mucho de qué hablar.
Allison Mack, quien interpretó a la amiga de Clark durante sus años de preparatoria, Chloe Sullivan, fue acusada de persuadir a mujeres para convertirse en esclavas sexuales como parte de una secta.
Esta secta era manejada por Keith Raniere, quien terminó siendo condenado a 120 años de prisión por cargos entre los que se enumeran chantaje, tráfico sexual, conspiración de trabajo forzado y conspiración de fraude electrónico.
Mack se convirtió en una especie de mano derecha de Raniere. Sin embargo, su participación fue lo suficientemente “sutil” como para que sólo le dieran tres años de prisión.
Superman Regresa
En 2006, llegó a las salas de cine Superman Regresa, una continuación directa de las cintas protagonizadas por Reeve, pero ahora, con Brandon Routh como el hombre de acero. La cinta pasó sin pena ni gloria y en los años posteriores fueron bastante discretos para Routh, quien tuvo participaciones poco recordadas en cintas como Scott Pilgrim vs. The World y Zack y Miri hacen una porno, por lo que muchos consideran que la primer víctima de la maldición durante esta era fue la carrera de Routh.
No obstante, más personas se verían afectadas por la maldición de Superman. Durante la producción del DVD de la cinta, tres personas vivieron situaciones peligrosas. Uno se cayó por las escaleras, otro cayó rompiendo una ventana de cristal y otro fue asaltado y agredido físicamente.
Bryan Singer, director de Superman Regresa, aseguró en su momento que su equipo de producción había absorbido la maldición por todos los involucrados en la cinta.
Henry Cavill vs Warner Bros
En la última aparición de Superman en el cine no se vivieron accidentes fatales, pero sí un sinfín de controversias que no dejaron trabajar al nuevo hombre de acero, Henry Cavill, en paz. Cavill debutó como Superman en Man of Steel del año 2013, si bien, no fue el regreso espectacular que muchos esperaban, el actor parecía perfecto para darle vida al personaje durante varios años más.
La cinta protagonizada por Cavill sería el primer paso para un nuevo universo de superhéroes, tal como en ese momento lo estaba logrando Marvel con gran soldura, de hecho, la desesperación por alcanzar a la competencia hizo que no se pudiera desarrollar el personaje de Superman y practicamente ninguno otro del universo de DC Comics.
Antes de juntar a todos sus superhéroes en una película, Marvel se tomó la molestía de desarrollar historias individuales, con dos o tres películas de cada uno para que el público empatizara con cada personaje. DC no vio necesario todo este proceso y tres años después del debut de su universo cinematográfico llegó Batman v Superman, presentando al Batman de Ben Affleck de manera abrupta dentro de una historia con muchos agujeros argumentales.
En esta cinta, la segunda aparición de Cavill como el hombre de acero, su personaje muere, tan sólo para ser revivido en La Liga de la Justicia que llegó un año más tarde. La película no gustó y Warner replanteó todo lo que estaba saliendo mal con su universo.
En 2021 llegaría la versión del director de La Liga de la Justicia, otra prueba del caos que vivía el universo cinematográfico de DC. Esta cinta fue mejor recibida que su antecesora, pero sólo se trató de cumplir un capricho. Zack Snyder, quien trató de mover los hilos de este universo durante casi una década, terminó diciendo adiós y la reestructuración de DC era inminente y la participación de Cavill estaba colgando de un hilo muy delgado.
La última vez que Cavill se mostró como Superman fue en una breve escena postcreditos de la cinta Black Adam de 2022, haciendo que muchos fanáticos auguraran el regreso del personaje en futuras producciones. Sin embargo, el anunció llegó: James Gunn sería el nuevo responsable de DC dejando atrás todo lo construido por Snyder.
En junio de este año, se hizo oficial la llegada de David Corenswet para la próxima cinta del hombre de acero, Superman: Legacy, haciendo de la era de Cavill como Superman la más inconsistente y confusa en toda su historia en TV y la gran pantalla.
Curiosamente, poco antes de su fallecimiento, Margot Kidder dio su opinión acerca de la presunta maldición de Superman:
“Eso es una tontería creada por los periódicos. La idea me da risa. ¿Y por qué no lo llaman la buena suerte de Superman? Si cuando tuve el accidente de coche no me hubiese dado contra un poste, me habría despeñado. ¿Por qué no se centran en eso?”