La parada del Metro que tiene la peor condición es la Juan Pablo Duarte, utilizada por más personas

Varias estaciones del Metro de Santo Domingo se encuentran en malas condiciones, lo que es un problema para las las personas minusválidas o con alguna discapacidad física que enfrentan dificultades de acceso.

Durante un recorrido realizado ayer por las distintas estaciones se observó que en la mayoría de las paradas los ascensores están dañados y otros inhabilitados, mientras los botones de los ascensores necesitan arreglos y las escaleras eléctricas no funcionan.

Asimismo, las correas de sostenimiento de las escaleras eléctricas están gastadas y otras tienen un amplio espacio sin correa. Otro detalle destacable es que aunque hay muchos dispensadores de desinfectantes de manos en las distintas terminales, estos están dañados o simplemente lo mantienen vacíos.

Se contaron al menos cinco estaciones que tienen los ascensores dañados y cuando se le preguntó a varios agentes del Cuerpo Especializado para la Seguridad del Metro (Cesmet) sobre el acceso de los minusválidos, indicaron que ellos levantan las sillas de ruedas con la persona que tiene discapacidad física y la trasladan a los diferentes puntos dentro de la estación del Metro.

Este escenario se puede observar en la estaciones Peña Batlle, ubicada en la avenida Máximo Gómez; en la Gregorio Luperón, en la Gregorio Urbano Gilbert y en la parada Joaquín Balaguer, debido a que los ascensores o están dañados o la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret) los mantiene inhabilitados.

La estación del Metro que está en peor condición es la Juan Pablo Duarte, la cual se utiliza para cruzar de la línea I a la línea II, pues allí las correas de sostenimiento de las escaleras eléctricas están rotas, quemadas y gastadas, mientras que la mayoría de las escaleras mecánicas no funcionan, lo cual ralentiza el paso de la muchedumbre que realiza el cambio de la línea I a las II, o a la inversa. Igualmente, las pocas escaleras mecánicas que están en funcionamiento hacen un fuerte chirrido al funcionar.

Además, los ascensores de esta estación no funcionan y tienen los botones en mal estado. Esta es la parada en la que más personas transitan durante el día, por lo que siempre hay una gran muchedumbre, estando los ciudadanos más vulnerables al coronavirus. Pese a ello, como en otras estaciones, los dispensadores de desinfectantes de manos están vacíos o dañados.