California.— El retirado pitcher mexicano Esteban Loaiza, quien se embolsó más de 43 millones en 14 temporadas en el béisbol de Grandes Ligas, negó el miércoles la acusación de que sea un traficante de cocaína.
Loaiza compareció ante la corte del condado de San Diego en Chula Vista, California. El espigado ex pelotero, que vistió un uniforme de color kaki de la cárcel, volteó la mirada hacia su padre y otros parientes antes de declararse no culpable.
La fiscalía acusó a Loaiza, de 46 años, por posesión y tráfico para la venta de más de 10 kilogramos (22 libras) de cocaína, una base de cocaína o heroína, y emplear un compartimiento para contrabandear drogas.
El que se especificó que la cantidad es de 10 kilogramos podría tener como consecuencia una pena más severa, así como el alegato de que las drogas fueron almacenadas en una residencia que Loaiza alquiló se encontraba a una distancia de 300 metros (1.000 pies) de una escuela primaria.
Loaiza afronta hasta 20 años y ocho meses de cárcel de ser encontrado culpable. El juez aumentó su fianza a 250.000 dólares, luego que la fiscalía argumento que el pitcher mexicano podría escapar. La abogada defensora Janice Deaton aceptó los términos, aunque no quedó claro si contemplaba presentar la fianza. Deaton y los familiares de Loaiza se retiraron de la corte sin hablar con la prensa.
Loaiza fue arrestado el viernes bajo sospecha de narcotráfico, después que agentes de la policía de San Diego detuvieron el Mercedes Benz que conducía por una infracción de tránsito y encontraron un “sofisticado” escondite para contrabando en la parte posterior del vehículo, según los investigadores. Después consiguieron una orden de allanamiento para una casa que alquilaba en una comunidad playera, donde las autoridades dijeron que hallaron paquetes con polvo blanco que se sospechaba era cocaína y que pesó un total de 44 libras (20 kilogramas). Los cargos que Loaiza afrontó el miércoles en Chula Vista son por cualquier cantidad sobre los 10 kilogramos, dijeron los fiscales.
Loaiza, de 46 años, jugó con varios equipos en las mayores entre 1995 y 2008, y devengó salarios por unos 43 millones de dólares en 14 temporadas. Su mejor año fue en 2003 con los Medias Blancas de Chicago, cuando tuvo marca de 21-9, 2.90 de efectividad y terminó segundo en la votación del Cy Young detrás de Roy Halladay. Fue elegido en dos ocasiones al Juego de Estrellas.