La Dirección General de Bienestar Estudiantil (DGBE) del Ministerio de Educación (MINERD) determinó a través de una investigación que la mayoría de los estudiantes de la Escuela Básica de Guanuma, afectados tras ingerir el desayuno escolar, habían comido empanadas fritas rellenas de huevo, salami y queso, y jugos que compraron en un lugar de expendio de ventas callejeras, cercano a la escuela.
La viceministra de Educación encargada de la DGBE, Susana Michel, dijo que los médicos pediatras que atendieron a los alumnos afectados informaron que no se trató de algo grave, ya que no fue necesario administrarles ningún medicamento ni solución endovenosa, por lo que se dejaron en observación durante unas horas y posteriormente fueron despachados a sus casas.
Michel afirmó, además, que también se estableció que los productos del desayuno (leche y bizcocho) fueron consumidos por el resto de la matrícula del centro educativo, compuesta por 321 estudiantes y personal administrativo, sin que presentaran ningún malestar o condición anormal.
Puntualizó que la DGBE continuará la evaluación de este evento de acuerdo con los procedimientos establecidos en cuanto a la calidad de los alimentos y la evolución de la salud de los estudiantes afectados.