En 2012, Liz Truss y su aliado Kwasi Kwarteng fueron dos coautores del folleto “Britannia Unchanged” que advertía que Gran Bretaña debía evitar parecerse a Italia. Irónicamente 10 años después como primera ministra y como alto funcionario, ambos protagonizaron una tragicomedia que permitiría que Gran Bretaña pudiera denominarse “Britaly”, fusión de Britain e Italy. Asimismo, al primer ministro Johnson lo han llamado “Borisconi”, vinculándolo a Berlusconi.
La inestabilidad política crónica de Italia ha infectado a Gran Bretaña que, desde 2015 ha tenido cinco primeros ministros: David Cameron, Theresa May, Boris Johnson, Liz Truss y el esperanzador Rishi Sunak.
En ese ambiente de fragilidad no sorprende que Rishi Sunak hijo de inmigrantes haya sido electo primer ministro, el primero de religión hindú y de ascendencia india. Con 42 años es el más joven gobernante en los últimos dos siglos .Sus credenciales políticas y profesionales son promisorias. Estudió en Oxford y en Stanford, como becario Fulbright. Allí conoció a su esposa, hija del multimillonario de vida austera Narayana Murthy, un Bill Gates de la India, fundador de Infosys, empresa global de informática, similar a Tata Consulting, que factura unos 18,000 Millones de dólares anuales en 50 países. Rishi es el político británico más acaudalado.
Además, Sadiq Khan, de origen pakistaní, hijo de un conductor de autobuses fue electo en 2016 como primer alcalde de Londres y de una capital europea, de religión islámica. Se juramentó como alcalde en un templo cristiano y en los últimos comicios fue reelecto hasta 2024.
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La falta de brillantez de los políticos actuales determina que se resucite un reporte de julio 1940 titulado “Hombres Culpables” (Guilty Men) en que 15 políticos británicas de alto nivel, encabezados por Neville Chamberlain, que en 1938 firmó el Pacto de Munich. Todos son acusados de aplicar una tímida política de apaciguamiento ante Hitler y de llevar “al borde de la aniquilación total lo que una vez había sido un próspero y seguro imperio”.
Aparte de los “Hombres Culpables” del 1940, ahora se dice que en el 2010 se inició el régimen de los tres “Hombrecitos” (Little Men) que en 12 años dejaron el país peor que como lo recibieron: Boris Johnson, Theresa May y David Cameron.
Recientemente, en un revisionismo histórico los “Hombres culpables” del 1940 han sido reivindicados y se ha reconocido que Inglaterra no estaba preparada para pelear en 1938 .Por tanto el apaciguamiento sirvió para ganar tiempo y armarse para la guerra
La erudición no es un antídoto contra el fracaso gubernamental pues Anthony Eden, el primer ministro que sucedió a Churchill era un especialista en estudios orientales que dominaba el árabe y admiraba la poesía persa.
Sin embargo, queriendo impedir la nacionalización del Canal de Suez por Nasser, coordinó junto a Francia e Israel una invasión de Egipto fuertemente condenada por Eisenhower, quien ordenó un alto al fuego y tomó medidas económicas que devaluaron la libra esterlina.
Khruschev, en una de las pocas veces que amenazó con usar armas nucleares anunció que bombardearía a Londres y Paris. Las dos super potencias resolvieron el conflicto y, ratificándose el nuevo orden surgido de la Segunda Guerra Mundial Eden y sus sucesores gobernaron un imperio en decadencia. Inglaterra dejó de ser una super potencia mundial , sin equipararse a Estados Unidos ni a Rusia durante la Guerra Fria, hasta 1991 cuando desapareció la URSS.