Jorge Luis Porras, experto internacional en fideicomiso, resaltó ayer las bondades de ese instrumento financiero para aplicarse en la Termoeléctrica Punta Catalina.

En un desayuno-conversatorio sobre “Experiencias del fideicomiso público en Latinoamérica”, organizado por la Fiduciaria Reservas, Porras resaltó que uno de los beneficios del fideicomiso es la rendición de cuentas.

Explicó que en un fideicomiso público, la fiduciaria tiene que estar abierta al escrutinio público y político, actuando con total transparencia en lo que hace.

El experto fue presentado por el gerente general de la Fiduciaria Reservas, Andrés Vander Horst, y el superintendente del Mercado de Valores, Gabriel Castro, en el hotel Intercontinental.

Resaltó que en América latina no existe un país que tenga una ley para el fideicomiso público.

Explicó que una ley sobre el particular en el país ayudaría a esclarecer algunos aspectos.

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Fideicomiso de Punta Catalina

Sostuvo que se supone que el fideicomiso de Punta Catalina fue estudiado y que el gobierno tomó esa decisión al ponderarlo.

Consideró que el fideicomiso de Punta Catalina debe tener un comité especial, debido a que la fiduciaria no es experta en todos los temas.

Entiende que el fideicomiso público debe tener un sentido, la aprobación legislativa y su objetivo es el interés público.

Manifestó que la discusión sobre el fideicomiso público en el país es similar a la que hubo en Costa Rica hace 25 años.

Expresó que el fideicomiso se ha venido desarrollando de una manera constante en otros países de América Latina desde hace más de medio siglo.

Agregó que las naciones han creado legislaciones particulares sobre el tema y la ley dominicana 189-11 recoge las mejores prácticas sobre el fideicomiso.

Resaltó de acuerdo con la Asociación Dominicanas de Fiduciarias, el país tenía en agosto pasado 932 fideicomisos con activos administrativos superiores a RD$159,688 millones, de los cuales un 77 por ciento estaba en el negocio inmobiliario.

Expresó que en todos los países de América Latina utilizan el fideicomiso con el fin de beneficiar a la población y para la inversión en proyectos de desarrollo.

Dijo que República Dominicana es uno de los países de la región que entró al fideicomiso más tardío, ya que se inició a través de la ley 189-11.

Señaló que los negocios fiduciarios de Panamá representan el 50% del producto interno bruto (PIB) y operan 58 entidades con licencia fiduciaria.