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La Comisión para la Igualdad de Género del Poder Judicial y artistas de Santiago, inaugura este jueves la exposición de arte contemporáneo “Ni + Ni -, Hombre Mujer Humanidad”, conformada por las obras de un grupo de artistas de distintas generaciones y vertientes que aportan su visión crítica sobre este importante tema, explorando los deseos, los estereotipos y las representaciones impuestas continuamente por la sociedad.
El evento, que será inaugurado a las 10:30 de la mañana en el Palacio de Justicia de Santiago, se extenderá hasta el viernes 18. La apertura será encabezada por autoridades judiciales, quienes han invitado a representantes de diversos sectores de la sociedad, en especial del quehacer cultural y social.
La jueza Martha Olga García Santamaría, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género del Poder Judicial, informó que junto a la Subcomisión Departamental de Santiago, la Dirección General de Niñez Adolescencia y Familia (DIGNAF) y a la curadora Ana Agelán, procuran llevar la sensibilización de género a través del arte.
Participan en la exposición Sole Fermín, Maurice Sánchez, Marcelo Ferder, Citlally Miranda, Cristian Tiburcio, Guadalupe Casasnovas, Rosa Miguelina Santos, Emmanuel Bretón, Gustavo Pérez, Rosángela Acosta. Las obras fueron curadas por Ana Agelán y Miguel Rivas.
En la inauguración tambien participo la subcoordinadora de la Comisión para la Igualdad de Género del Poder Judicial, magistrada Esther Agelán Casasnovas.
“Creemos que arte es la manifestación máxima de la cultura donde se exponen las cualidades que han sido atribuidas a hombres y mujeres, dependiendo de su género y donde se puede, sobre cuáles de ellas han constituido un obstáculo para el desarrollo y el ejercicio pleno de los derechos de la mujer”, expresó la magistrada García Santamaría.
Dijo que es un llamado a la toma de conciencia, se denuncian desigualdades de género a través de expresiones creativas, que ponen en evidencia el contexto en que vivimos y proclaman mensajes de igualdad social, equitativa y justa.
Artistas y obras. Sole Fermín (Puerto Plata-1983) inicia la muestra con un performance recreando un espacio de reflexión para valorizar la existencia y desconstruir estereotipos.
En contraparte se presenta la obra de Miguel Rivas (Santiago, 1968) que sintetiza la formas femeninas, llevando su esencia hacia una degradante deshumanización, objetualizando a la mujer sexualmente en cuatro provocativas esculturas de cerámica de colores intensos.
En las fotografías de Maurice Sánchez (Santo Domingo – 1970), se rescata la imaginería popular de carácter androcéntrico, donde las formas de la mujer son exageradas en una evidente sexualización y explotación publicitaria.
La obra de Marcelo Ferder (Buenos Aires, 1958) ridiculiza el machismo con una divertida fórmula caricaturesca que replica la idiosincracia popular caribeña, en la escultura de un jugador de baseball portando un bate desproporcionado, que implica claramente el carácter sexual del hombre caribeño.
El trabajo del maestro ceramista Cristian Tiburcio (Bonao, 1958), participa con una obra dobe representativa del hombre y la mujer, en las que el género recobra su sentido de esencia, pues en la ambigüedad de las formas y colores tropicales se pierde la distinción de las características formales que diferencian la feminidad de la masculinidad.
Enmarcándose dentro del concepto de esencia, la obra de Citlally Miranda (Santo Domingo, 1970), recure a los fondos profundos de la identidad, creando imágenes que expresan la verdad interior del individuo, como acercamientos a su estructura molecular, viendo la esencia como forma de expresar la verdad y relegando todo lo demás al ámbito de lo superficial.
La artista visual Guadalupe Casasnovas (EEUU – 1960) recrea la permanencia y transformación de roles de una generación a otra, con una serie de fotografías matrimoniales, que ilustran cómo la carga social se expresa en la familia.
En los dibujos de Rosa Miguelina Santos (Licey, 1970) se recrean escenas cotidianas que superan las expectativas de los estereotipos a los que estamos acostumbrados, viendo así como se abre el abanico de posibilidades en cuanto a las representaciones de la realidad entre los géneros.
La serie fotográfica de Emmanuel Bretón (Santiago – 1980) explora la lucha personal de una mujer que se enfrenta a si misma, en contención de sus de sus deseos, hasta un momento de catarsis, en el que se entrega o se rinde, pero sus emociones no parecen haberse liberado. Esta obra lleva a la reflexión de cómo las ataduras pasan al nivel sicológico y liberarse es más complejo de lo que parece. Los estereotipos y patrones forman parte de nuestro legado social, se remontan a un pasado lejano y acarrean ideas profundamente arraigadas.
Gustavo Pérez (Santo Domingo, 1980) experimenta con la formación de la identidad, en una instalación interactiva que motiva una reflexión en la conciencia del espectador acerca de las herramientas que se le otorgan a las personas en el momento que se están formando, y cómo estas pueden afectar su forma de interactuar con el mundo.
Rosángela Acosta (Santo Domingo – 1983) presenta la dualidad de la esencia humana a través de piezas de vestuario que diferencian claramente los géneros. Ella los unifica en una creación frágil y unisex.
