«Todo el mundo puede hacer su teteo, todo el mundo puede hacer su fiesta. Y los grandes comentaristas defienden a los teteos. Sin embargo, no tienen derecho a adorar a su Dios. Nos quieren quitar el derecho de adorar a nuestro Dios», afirmó Ezequiel Molina, fundador del Ministerio Evangelístico La Batalla de la Fe.

Durante el acostumbrado sermón de la concentración evangélica nacional, con el tema «Esperanza de libertad», Molina detalló las diferentes libertades de las que goza la República Dominicana y los países del mundo, como la del pensamiento, culto o reunión, y aprovechó para dar una advertencia.

«El día que no nos permitan reunirnos, nos vamos a reunir por encima de la cabeza del infierno. Y los enemigos de la fe, que se vayan preparando, porque este pleito va el día que ellos determinen», sentenció el pastor, quien criticó además que muchos pueden hacer «sus teteos y fiestas» pero no recibir la palabra de Dios por criticar la concentración número 58 celebrada en el Estadio Olímpico Félix Sánchez.

Narró la promesa que le hizo Jehová a Moisés de libertar el pueblo de Israel de Egipto, el cual se encontraba bajo esclavitud, basado en el relato del libreo de Éxodo capítulo 3 de la Biblia.

Más temprano, se reconoció a varios de los congresistas que se han identificado como provida.

«Ellos han estado dando la cara por la vida y por los valores cristianos en el Congreso de la República, especialmente en la Cámara de Diputados (…). Porque se acabó el tiempo de que los evangélicos voten a la cieguita. No podemos votar por demonios que vayan al Congreso a llevar leyes que promuevan el aborto y la homosexualidad«, aseguró el pastor Ezequiel Molina Sánchez, uno de los organizadores del evento.

Los diputados, por los cuales oraron y estuvieron presentes en el evento, fueron: Nelsa Soraya Suárez,Isabel de la Cruz, Jesús Ogando, Betty Gerónimo, y en representación del Elías Wessin Chávez, Samuel Ramos y el diputado Eugenio Cedeño.

Ayer, el pastor Ezequiel Molina Sánchez, uno de los organizadores de«La Batalla de la Fe«, precisó que el evento que se celebra cada año el día 1 de enero, no sólo tiene un alto valor espiritual, sino que también servirá para sanidad de la República Dominicana.