Dedicado a: el presidente Luis Abinader, el liderazgo, económico, político, social y religioso de la nación 2/4
Los acontecimientos de octubre de año 2023 en Israel marcan una nueva coyuntura al confluir actores que dan particular fisonomía al conflicto árabe-israelí, el caso de la fuerza militar Hezbollah y participación como consecuencia del asesinato de su alto mando militar Fuad Shukr en Beirut.
En reuniones con amigos y relacionados planteamos lo extraño que esta milicia, ante situaciones recientes presentadas en el conflicto árabe-israelí, no haya participado. De hacerlo, aumentaría las enormes incertidumbres presentes en un mundo, como hemos referido, fragmentado, con situaciones de vulnerabilidad muy pronunciadas.
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Entonces, ¿Cómo gravitaría la participación de esta fuerza militar en la región del Medio Oriente y el mundo, de modo específico, en el conflicto árabe-israelí de participar?
Bañada por corrientes religiosas, específicamente chiita del Líbano donde se origina y políticas del Medio Oriente de finales de los años 60 y gran parte de los 70, aparece esta organización (partido de Dios en árabe). Es la guerra civil libanesa del 1982 al 1990 que sirve de escenario a la germinación de un nuevo actor que vendría a gravitar en el mundo árabe y que, en palabras de Itamar Rabinovich, diplomático y académico israelí, con la invasión israelí al Líbano en 1982 se “descorcha el elemento chií” representado militarmente hablando por Hezbollah. Los conflictos en Medio Oriente dan a la región la fisonomía de un rompecabezas el que, a medidas que van colocando las fichas, generan nuevos espacios, escenarios y actores convertidos en decisivos en el acontecer de la región.
El protagonismo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en tránsito hacia Hezbollah, planteaba una problemática mayor a Israel como consecuencia de que en el sur del Líbano no se formaba una organización más para luchar por el desalojo de Israel de esta zona libanesa, veía desarrollarse uno de los grupos extremistas más importantes del mundo, con tal dimensión que fue denominada más letal que Al Qaeda.
En esta organización se agrupan aquellas de orientación chiís esparcidas por el Líbano con la dirección de Irán cuyo líder supremo Ruhollah Mojomeini, Hezbollah lo asumió como su guía.
Es así entonces como la dependencia de esta organización militar de Irán es irrebatible. El académico Amal Saad-Ghorayeb estudioso de Hezbollah, refiere que esta hubiera tardado 50 años extras en su desarrollo sin el respaldo de Irán.
Como resultado de su desarrollo y consolidación, esta organización militar ha convencido a hombres y mujeres del mundo árabe que Israel puede ser derrotado, logrando implantar sus fundamentos y obtener victorias comprobables contra esta nación, los enfrentamientos Israel-Hezbollah han estado presentes en Medio Oriente con las aprensiones que generan; su cuerpo militar de aproximadamente 100,000 efectivos lo convierten en real amenaza para incidir de modo preponderante en la estabilidad regional medio oriental, específicamente las naciones judías, encabezadas por Israel.
En tercera entrega, coyuntura internacional más adversa desde 1990.