Loyda Peña 
Francelys Fulcar Rodríguez, la mujer que en abril del 2022 mató a su jefe chino en un incidente ocurrido en el negocio donde trabajaba, fue enviada ayer a prisión preventiva por tres meses, por no ofrecer garantías de que no se sustraerá de los actos procesales a que será sometida, como hizo cuando huyó hacia España de donde fue repatriada.
De inmediato, sus abogados Tomás Castro y Luis Alcántara, informaron que apelarán ante la Corte la decisión del juez Rigoberto Sena, de la oficina de Atención Permanente, por entender que la muerte de Zongxin Chen “fue un hecho realmente involuntario”, y que la vida de la imputada podría correr algún riesgo en prisión.
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Castro dijo además que en esta parte del proceso “no debía tomarse en cuenta la gravedad del hecho”. Lamentó que no obstante presentar presupuestos incluida las actas de sus hijos menores, para que a Fulcar Rodríguez le fue impuesta una medida de coerción menos gravosa, el juez la envió para el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) de Najayo en San Cristóbal.
El homicidio involuntario como lo calificó el Ministerio Público, habría ocurrido luego de que Chen le lanzara un objeto a la empleada y esta tomó del negocio un objeto corto punzante para defenderse, lo hirió y falleció.
