Matías Bosch, director ejecutivo de la entidad, destacó el trabajo que hizo López Damm en República Dominicana y en Haití,
La Fundación Juan Bosch despidió al embajador de Ecuador en República Dominicana, Carlos López Damm, con un reconocimiento por sus cinco años de trabajo diplomático a favor del estrechamiento de los vínculos entre ambos países.
Matías Bosch, director ejecutivo de la entidad, destacó el trabajo que hizo López Damm en República Dominicana y en Haití, donde también fue embajador, y los históricos lazos de hermandad entre patriotas de ambas naciones como Eloy Alfaro, Juan Pablo Duarte, Oswaldo Guayasamín y Juan Bosch.
«Durante la gestión del embajador López Damm el Ecuador hizo cosas que no son parte de los límites de la tradición diplomática: la cooperación cultural y educativa, la vinculación con la reivindicación del Ecuador por la defensa de las riquezas naturales, la participación en la Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2013, la participación del presidente de la Corte Constitucional de Ecuador, Patricio Pazmiño Freire, la recuperación de la memoria de Eloy Alfaro y su vinculación con Máximo Gómez y su participación en la reconstrucción de Haití”, aseveró.
Junto con el reconocimiento, Bosch entregó al embajador López Damm los libros: “La revolución es creación”, de Ángel Villarini; “De Cristóbal Colón a Fidel Castro. El Caribe frontera imperial”, Juan Bosch; “Las huellas literarias de Juan Bosch”, de Nestor Medrano; y “República Dominicana y Haití: el derecho a vivir”, de un colectivo de autores.
El embajador López Damm. De su lado, el embajador López Damm agradeció el gesto de la Fundación Juan Bosch y explicó que estar en la República Dominicana no solo le permitió revivir lo que ha significado Juan Bosch en la historia continental, sino que como extranjero –que no se siente como tal- descubrió que Bosch fundó los dos principales partidos: visión, decepción.
“Para Juan Bosch República Dominicana era muy pequeña, su ideario iba más allá. Quizás como en algún momento se sintió defraudado tuvo la necesidad de crear otro espacio, ese espacio que busca esa revolución intergeneracional y de género que vive Ecuador y que muchas semejanzas existen con República Dominicana”.
Finalmente, el diplomático expresó que hay vínculos de antaño y del presente que auguran un futuro compartido entre Dominicana y Ecuador.